La noche antes del examen

Oleksandr Pronkevych
Oleksandr Pronkevych CATEDRÁTICO DE LITERATURA ESPAÑOLA EN LA UNIVERSIDAD DE MYKOLAIV

INTERNACIONAL

Manifestantes a favor de la entrada de Ucrania en la Unión Europea, a las puertas de la sede del Consejo de Europa en Bruselas
Manifestantes a favor de la entrada de Ucrania en la Unión Europea, a las puertas de la sede del Consejo de Europa en Bruselas STEPHANIE LECOCQ | EFE

24 jun 2022 . Actualizado a las 15:39 h.

Espero que todos conozcan en qué consiste la noche antes del examen. Se han estudiado los libros de texto, las tareas previstas en el programa están hechas, la preparación ha acabado. Sin embargo, el alumno no duerme porque el miedo a no aprobar el examen no le deja pegar un ojo. Ese estudiante en la noche antes del examen es ahora Ucrania, en víspera de la reunión del Consejo Europeo en que se deliberará sobre su solicitud de adhesión a la UE. 

A todos los ucranianos nos preocupa saber si los examinadores serán unánimes en su benevolencia a la hora de aceptarnos no como Estado miembro, sino como candidato a entrar en el club sagrado.

Sin embargo, no solo los temores a no estar preparada impiden dormir a Ucrania. Lo peor es la situación en el frente, más dramática que nunca. En el este, los rusos están lanzando al combate nuevas reservas para tomar Severodonetsk, Lysychansk y otras ciudades, y ocupar así completamente los territorios de las regiones de Donetsk y Lugansk. Los bombardeos de Járkov, Mykolaiv, Ochakiv y Odesa se están siguiendo con rabia. El Ejército ucraniano está contraatacando en el sur. Los rusos son muchos y en un momento surge la sensación de que ellos van a aplastarnos con su superioridad en artillería y carne de cañón. En estas condiciones, los días y las noches son intranquilos.

La preparación de Ucrania para aprobar el examen y obtener el estatuto de candidato a entrar en la UE es horrible en el sentido directo de la palabra. Esa preparación incluye la Revolución naranja, la Revolución de la Dignidad, conocida como Euromaidán, con sus batallas surrealistas en el centro de Kiev, la guerra con Rusia, que dura ochos años, la pérdida de Crimea, del Dombás, la ocupación de Jersón, Melitopol, Energodar. Es la tragedia de Mariúpol, convertida por los invasores en ceniza. Es el sufrimiento de decenas de miles de personas asesinadas, secuestradas, violadas. Me parece que estos hechos son pruebas más que convincentes para persuadir a cualquier tribunal de examinadores de que nuestras intenciones de integrarnos en la UE son serias.

Sin embargo, «hay un problema», como decía Hamlet, el príncipe danés. No estamos seguros de que en el último momento no nos digan que no estamos listos. Nos han avisado de que nos echarán del club de los elegidos si no realizamos reformas. Y es buena cosa que nos exijan reformas para prepararnos para otro examen, para que seamos, por fin, miembros de la UE. Estamos agradecidos por esta ayuda porque debemos aprender a cambiar para mejorar. Solamente nosotros podemos hacerlo.

Y hay un problema más. La guerra actual nos ha demostrado que los examinadores mismos no son tan impecables como pretenden ser. Ahora la UE se nos presenta como una comunidad en la que valores, creencias y principios están en profundo conflicto con intereses económicos, egoísmos nacionales y populismos. La hipocresía cubre este conflicto. Henrik Ibsen comparó a Europa con un barco que lleva un cadáver en su bodega.

Queda poco tiempo para conocer el resultado de la oposición.

 Anteriores entregas

22 de junio El regreso a Europa

21 de junio El genocidio no es un pretexto informativo

20 de junio Cuando el helecho florece

18 de junio No es fácil hablar sobre la guerra

17 de junio Los dibujos animados contra la guerra

16 de junio Mirando vídeos de mis estudiantes

15 de junio El vals de la despedida

12 de junio Ucrania en la revista TTAK

10 de junio Los girasoles, el símbolo de Ucrania

9 de junio ¿Es Ucrania nacionalista?

7 de junio Guerra, ¿cómo te llamas?

5 de junio Pushkin ha vuelto

4 de junio Escuchen las voces de Ucrania

3 de junio El verano de nuestra victoria

2 de junio El arte de pasar el sábado en Mykolaiv

31 de mayo ¿Es Rusia fascista?

30 de mayo Sobre los asuntos eclesiásticos

29 de mayo Lesya Ukrainka

27 de mayo La guerra y el tiempo

26 de mayo Releyendo mi diario

25 de mayo Moisés

24 de mayo ¿Adiós Pushkin?

22 de mayo La tragedia de la Mariúpol artística

21 de mayo Iván Frankó, el divulgador de la literatura española en Ucrania

20 de mayo El genocidio en Ucrania

18 de mayo Carta de un soldado: «Me siento feliz en Mykolaiv»

17 de mayo «Stefania», el homenaje a la madres de Kalush Orchestra

16 de mayo Nostalgia

14 de mayo Los desastres de la guerra (versión siglo XXI)

13 de mayo Mi Galicia

12 de mayo Un congreso cultural pospuesto

11 de mayo El desfile de Putin y el esturión podrido

9 de mayo Gregorio Skovorodá

8 de mayo Regalos para la fiesta

7 de mayo La guerra patriótica de Ucrania

4 de mayo Ucrania celebrará el 8 de mayo el Día de la Victoria

3 de mayo Historia del día de la victoria

1 de mayo Anabel

30 abril La resurrección de Ucrania

29 de abril Otra vez sobre el Instituto Cervantes en Moscú

28 de abril Escaparse de la zona ocupada

27 de abril El «Guernica» de Picasso

26 de abril La resistencia al invasor, en los memes de la Pascua ortodoxa

24 de abril El Día del Libro

23 de abril La tragedia del sur de Ucrania

22 de abril El Jueves Limpio

21 de abril Una parábola sobre las burbujas

20 de abril El Martes Grande en Ucrania

19 de abril La Pascua de Resurrección y el Domingo de Palma en Leópolis

18 de abril Las noticias de Mykolaiv

15 de abril Las diosas enfurecidas

13 de abril Hobbit y Gandalf

12 de abril La primavera

11 de abril La batalla por el «borsch»

 10 abril Mi facultad en la guerra

9 de abril Folclore de la guerra

8 de abril El escándalo de una traducción

7 de abril ¿Qué es la rusofobia?

6 de abril Sigo recibiendo cartas

5 de abril El genocidio y la cultura rusa

4 de abril El destino de una familia hispano-ucraniana

3 de abril: Esperando la ofensiva rusa sobre el Dombás

2 de abril: Proyección interrumpida de películas

1 de abril: Oda al teléfono celular

31 de marzo: Llorad y rezad por Petro

30 de marzo: Cómo derrotar al enemigo muy rápido y con pocas bajas

29 de marzo: El 28 de marzo

28 de marzo: ¿Podemos repetir?

27 de marzo: Un primer balance de los 30 días de la invasión rusa

26 de marzo: Humor en la guerra

25 de marzo: Educación sentimental

24 de marzo: Una pregunta maldita

23 de marzo: Nuevos bombardeos en la ciudad de san Nicolás

22 de marzo: Las familias rotas que deja el conflicto

21 de marzo: Imbuidos del espíritu quijotesco

20 de marzo: La carta de mi estudiante

18 de marzo: Pensando en mi universidad

17 de marzo: Así intentaron silenciarme con porno ruso

15 de marzo: Golpea a los tuyos para que otros se asusten

14 de marzo: El domingo siempre es domingo

13 de marzo: Día 15. ¿Debe cerrar el Instituto Cervantes de Moscú?

12 de marzo: El papel de los hispanistas de Ucrania en la guerra con Rusia

11 de marzo: Mi encuentro en Leópolis con el periodista de La Voz de Galicia

10 de marzo: Nos hicimos refugiados

8 de marzo: Las últimas horas en la ciudad de san Nicolás

7 de marzo: Protegidos por san Nicolás

6 de marzo: La ciudad de san Nicolás

5 de marzo: Ucrania: dos referencias literarias

4 de marzo: Por qué ha fracasado la guerra relámpago

 3 de marzo: Ucrania resiste y vive

 2 de marzo: Mis peores temores

 1 de marzo: El columpio de esperanzas y temores

 28 de febrero: Tanques en Mykolaiv

 27 de febrero: Rezad por Kiev

 24 de febrero: «¡Feliz cumple, profesor!» (Sé que puede ser el último de mi vida)