El ciclista, con 20 años, fue líder hace 35 años en las cuatro etapas gallegas de La Vuelta de 1985, algo que nunca más volvería serlo en su carrera deportiva
Tras imaginar lo que hubiese hecho en un día de rutina normal, el segundo entrenador del Barça se centró en jugar al ajedrez, cocinar y aprender catalán