El voto conjunto de PSOE y PP salva el proyecto de la estación intermodal de A Coruña
A CORUÑA
El apoyo de los populares al convenio marco permitió que saliese adelante pese al rechazo de la Marea
03 feb 2022 . Actualizado a las 19:12 h.Los votos conjuntos del PSOE y el PP salvaron este jueves a los coruñeses de un nuevo retraso en la estación intermodal, uno de los grandes proyectos pendientes en A Coruña que ha sido víctima ya de importantes demoras.
Se debatieron en el pleno cuatro asuntos imprescindibles para desarrollar el proyecto tal y como han acordado el Ayuntamiento, la Xunta y el Estado, que invertirán casi 100 millones en la estación: el convenio marco para ejecutar y coordinar las obras, el acuerdo para construir la estación de buses y el párking subterráneo, la modificación parcial del plan general en el polígono de A Sardiñeira y otro trámite similar en el polígono de Joaquín Planells.
Salieron adelante. Pero solo socialistas y populares votaron a favor de todos los puntos. El apoyo del PP garantizó la mayoría absoluta necesaria para sacar adelante tanto el acuerdo marco como los cambios del plan general.
El gobierno local no contó con el apoyo de su socio en la negociación presupuestaria, la Marea Atlántica, que había presentado alegaciones al acuerdo marco. Esas reclamaciones fueron rechazadas, por lo que votaron en contra. Además se abstuvieron sobre el convenio para construir la terminal de buses y sobre la modificación del PGOM en Joaquín Planells. Ese último punto y el del acuerdo marco requerían mayoría absoluta, por lo que el voto del PP fue imprescindible.
También las votaciones de BNG y Podemos variaron, aunque no rechazaron ningún punto. Los nacionalistas se abstuvieron en el convenio marco y en la reforma del PGOM en Joaquín Planells. Podemos hizo lo mismo en los dos convenios, el general y el de la terminal de buses.
Después se debatió el estudio de detalle de la nueva residencia de mayores de Eirís, que construirá la Fundación Amancio Ortega. Salió adelante con los votos favorables de todos los grupos y la abstención del Bloque.
Una infraestructura clave
Sobre la intermodal, el concejal de Urbanismo, Juan Díaz Villoslada, destacó que en la sesión se produjo un «gran acordo» que no solo mejorará la movilidad en A Coruña y su área, sino que será «unha importante palanca de rexeneración urbana» para Os Mallos, con la remodelación de la plaza frente a la estación, las avenidas de Joaquín Planells y A Sardiñeira, y nuevos servicios como un párking subterráneo de 370 plazas. Añadió que el Ayuntamiento contribuirá a la inversión total con 14 millones de euros.
Antonio Deus (PP) dijo que los socialistas son «una marioneta en manos de la Marea» y destacó el valor del apoyo de su grupo que, «por responsabilidad con la ciudad», vuelve a «sacar las castañas del fuego» al PSOE cuando «sus socios le dan la espalda».
El viceportavoz de la Marea, Iago Martínez, insistió en que su grupo no quiere obstaculizar la obra, pero subrayó que no podían votar a favor tras el rechazo de sus alegaciones al convenio marco. Martínez anunció que en el presupuesto habrá 800.000 euros para la intermodal. Es uno de los primeros datos que se conocen sobre las cuentas, que debieron entrar en vigor el 1 de enero.
Martínez explicó que las dudas de su grupo sobre el proyecto parten de los 5.100 metros de aprovechamiento comercial previstos. También el BNG y Podemos tienen esas dudas, y de ahí sus votaciones. El portavoz nacionalista, Francisco Jorquera, lo consideró «excesivo» y lamentó que el Estado vuelva a ser «un rañas» a la hora de invertir en A Coruña y «pretenda beneficiarse» utilizando el patrimonio público.
Isabel Faraldo, concejala no adscrita de Podemos, lo calificó de «mostro desmedido» y, como los portavoces de Marea y BNG, mostró su temor a que ahogue al comercio local en Os Mallos.
Díaz Villoslada restó importancia a las diferencias, e insistió en que los aprovechamientos proporcionarán servicios tanto a los viajeros como a los vecinos del barrio, además de que ayudarán a financiar la construcción.
Ucrania, las placas de la alcaldesa y la memoria histórica
Tras varios plenos sin grandes asuntos de gestión, el pleno debatió los cuatro asuntos de la intermodal en un solo turno, aunque con algo más de tiempo para las intervenciones. Así, la principal inversión que ha pasado por la sesión en los últimos meses se ventiló en poco más de una hora. Mientras que al debate de las mociones, que no tienen peso jurídico, se dedicaron más de cinco horas, cuatro por la mañana y algo más de una por la tarde. Entre las mociones figuraba una sobre el conflicto de Ucrania, en la que Isabel Faraldo hacía un llamamiento a mantener la paz. El debate derivó en una discusión sobre la historia de Rusia y los países eslavos, el autoritarismo de Putin, las simpatías ultraderechistas de parte del nacionalismo ucraniano, la necesidad de mantener la paz mundial... Hasta que José Manuel Lage (PSOE) recordó que María Pita está donde está, y que a nadie en Crimea o el Donbás va a «arquear unha cella» por lo que vote el pleno de A Coruña, que no tiene ninguna competencia al respecto. No es la primera vez que el pleno dedica tiempo a la política internacional -en los últimos años se ha hablado de Israel, Venezuela, Estados Unidos o Siria, entre otros-, pero si fue la primera vez que un miembro de la corporación dijo en alto lo que todos saben: es una perdida de tiempo.
También se habló de memoria histórica. Marea, BNG y Podemos presentaron una moción conjunta, rechazada por el PP e indirectamente por la abstención del PSOE, par que se retiren del callejero nombres como el del exalcalde Alfonso Molina por su vinculación con el Franquismo, e instando al gobierno local a secundar un «roteiro da vergoña» por esas vías. El PP contraatacó con una enmienda pidiendo que el roteiro circule por las calles afectadas por la okupación. Tampoco salió adelante.
En respuesta a esa enmienda, el Bloque presentó otra a una moción posterior instando a que se retiren de las calles las placas con el nombre de Manuel Fraga, expresidente de la Xunta. La retiraron antes de iniciar el debate, ya que solo pretendían poner en cuestión la del PP. La moción de los populares que se debatía instaba al gobierno local a dejar de poner el nombre de la alcaldesa en todas las placas que inaugura. Rosa Gallego recordó que en el 2012, cuando gobernaba su partido, se aprobó por unanimidad una moción que vetaba los nombres en las placas. Pero José Manuel Lage contraatacó con una placa del 2015 en la que figuraba el nombre de Carlos Negreira, entonces alcalde de A Coruña. Lage ironizó con que le obligasen a defender a un líder del PP en materia política, lo que atribuyó al «desnorte» de ese partido.
Habrá un presupuesto PSOE-Marea, pero no un proyecto de ciudad
Como en enero, el pleno arrancó con Juan Díaz Villoslada valorando la gestión del gobierno local. La ciudad «funciona como un reloxo», como los de María Pita y el Obelisco, añadió. Su reparación sirvió al edil de Urbanismo el marco simbólico para ensalzar la labor del ejecutivo de Inés Rey, que trabaja y avanza, enumeró, en la intermodal, el Novo Chuac, Santa Lucía, el puerto o los mercados. Mientras, añadió, llegan noticias de grandes inversiones privadas.
Todos esos proyectos dependen del área de Urbanismo, que ha sido y será clave para todos los gobiernos porque desde allí se diseña y se hace ciudad.
El resultado de las votaciones demuestra que el bloque de izquierdas que sostuvo la investidura de Inés Rey (PSOE, Marea y BNG) no comparte un proyecto político en esa materia. No es la primera vez. Hay diferencias en Percebeiras, en el parque del Agra, en el Novo Chuac y en el futuro del puerto, entre otros. En esos asuntos, claves para la ciudad, el gobierno del PSOE ha avanzado cuando ha contado con el PP, y cuando no lo ha hecho —vease el caso del Agra— se ha encontrado con el rechazo del pleno a sus planes.
Esa realidad, comprobable en las actas plenarias, no tiene un reflejo exacto en la situación política. El PSOE está negociando solo con la Marea el presupuesto. A juzgar por las palabras de ambos grupos es probable que salga adelante, aunque sea con retraso. Pero será difícil que se traduzca en un proyecto coherente de ciudad. Baste señalar que la Marea ya ha rechazado incluir fondos para adquirir los terrenos del puerto, como acordó el gobierno socialista con la Xunta y la Autoridad Portuaria. Si el PSOE quiere cumplir, tendrá que enmendar las cuentas a posteriori, es de suponer que con el PP, o dejarlo para otro mandato.
Aunque su acuerdo pueda ser imprescindible, los dos partidos hicieron gala otra vez de sus diferencias. Chocaron incluso en la intermodal. Antonio Deus (PP) hizo una defensa tan encendida de las inversiones de la Xunta en la ciudad que dio pie a Díaz Villoslada para preguntarle si le hicieron el discurso en San Caetano, y para criticar que plantean el asunto del puerto como «su toma dende San Caetano». Algo es cierto, por mucho que el PP coruñés elogie la gestión de Núñez Feijoo, no parece que el presidente de la Xunta vaya a ser su próximo candidato a la alcaldía.