Concello, Xunta y Gobierno firman el pacto para construir la estación intermodal de A Coruña tras cinco años de retrasos

Xosé Vázquez Gago
Xosé Gago A CORUÑA

A CORUÑA CIUDAD

Cedida

Las tres Administraciones se comprometen a construir la nueva terminal mediante un documento que estaba pendiente desde el 2016, cuando el anterior gobierno local lo rechazó

26 may 2021 . Actualizado a las 21:00 h.

Cinco años después que Vigo, Santiago y Ourense firmasen los respectivos convenios que han permitido la construcción de sus estaciones intermodales, A Coruña ha suscrito el acuerdo para hacer la suya. Lo rubricaron ayer en Madrid la alcaldesa, Inés Rey; la conselleira de Infraestruturas, Ethel Vázquez; el ministro de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, José Luis Ábalos, y la presidenta del ADIF, Isabel Pardo de Vera. Les acompañaron el delegado territorial de la Xunta en A Coruña, Gonzalo Trenor, y el secretario general de Infraestructuras, Sergio Vázquez.

Las estaciones intermodales agrupan en una sola construcción diferentes modos de transporte. La de A Coruña se levantará aprovechando las actuales instalaciones de San Cristóbal.

El ADIF adaptará la actual infraestructura ferroviaria a la llegada del AVE, mejorará la accesibilidad peatonal al complejo, y redactará el proyecto para hacer la pasarela entre las avenidas de A Sardiñeira y el Ferrocarril.

La Xunta construirá la nueva terminal de autobuses, que estará situada entre las actuales vías del tren y la avenida de A Sardiñeira.

El Gobierno gallego también se encargará de la construcción del nuevo aparcamiento, que estará dotado con 325 plazas. Su financiación correrá a cargo del Gobierno central y del Ayuntamiento, que a cambio podrá explotarlo durante un período de 20 años. Luego será transferido al ADIF.

El Ayuntamiento remodelará las avenidas de A Sardiñeira y el Ferrocarril, desde las que se accederá al complejo y al párking. También reformará la plaza situada delante de San Cristóbal. Las obras servirán así para humanizar el entorno de la estación.

En total, los trabajos tendrán un coste de 80 millones de euros. El Gobierno central considera que la infraestructura cumple con varios de los criterios que requieren las nuevas convocatorias de fondos europeos, por lo que el proyecto optará a esas ayudas.

De los citados 80 millones, 17,5 corresponden a la terminal de autobuses y 10 millones al párking. El resto de los fondos servirá para adaptar la infraestructura ferroviaria, construir los accesos, mejorar el entorno y levantar la citada pasarela, entre otras obras.

La previsión del Gobierno central es que los proyectos de adaptación de la remodelación de la estación ferroviaria y elementos comunes con la estación de autobuses estén listos en el último trimestre de este año. Por su parte, la conselleira de Infraestruturas señaló que la Xunta «está preparada» para ejecutar su parte y prevé licitar la terminal de autobuses durante este mismo año. Su previsión, añadió, es que la estación esté lista para el 2023.

La alcaldesa, Inés Rey, celebró que «unha vez máis o diálogo co resto de Administracións dá os seus froitos, é o que reclama a cidadanía nun momento tan complicado como o que vivimos, que sexamos quen de entendernos, como temos feito en asuntos tan relevantes como o tren a Langosteira ou o Novo Chuac».

Desde Vázquez y Borrell

La regidora señaló que el compromiso alcanzado para construir la estación intermodal eleva a «700 millóns» la inversión de otras Administraciones en la ciudad. Además del tren a Langosteira o el Novo Chuac, mencionó proyecto como el saneamiento de la ría do Burgo, la construcción de la pasarela de Pedralonga, la ampliación de Alfonso Molina o la de A Pasaxe, la dos últimas pendientes de fondos de la UE.

La alcaldesa dijo que A Coruña «recibiu nestes dous anos un impulso esencial para a súa transformación nunha cidade máis amable, máis humana, con máis servizos e con máis oportunidades, máis necesarias que nunca».

La regidora destacó «o compromiso inversor» del Gobierno central, que «constitúe o impulso da maior transformación urbana de A Coruña desde a construción do paseo marítimo impulsada polo alcalde Francisco Vázquez e o ministro Josep Borrell».

La Xunta pide celeridad

El inicio de las obras aún requiere la firma de otros tres acuerdos para cerrar distintos flecos. La conselleira Ethel Vázquez pidió «celeridade e urxencia» a las demás Administraciones para evitar nuevos parones en un proyecto que arrastra años de demora. Vázquez ya ocupaba su cargo en el 2016, y vio en primera persona como los cambios de criterio del anterior gobierno local de la Marea —tanto en el proyecto como sobre el convenio, que rechazó en el 2016 para enviar una propuesta propia, pero no lo hizo hasta noviembre del 2018— provocaban un importante retraso en la intermodal coruñesa, que iba camino de ser la primera de Galicia y se quedó a la cola.

Entre otros problemas, esos cambios obligaron a la Xunta a rehacer proyectos que ya tenía listos, con el consiguiente gasto extra. También provocaron una demora que impidió que el proyecto de la intermodal se pudiese financiar mediante la anterior remesa de ayudas europeas, aunque Vázquez anunció que la Xunta utilizaría fondos propios si era necesario para ejecutar la obra.

La conselleira reivindicó ayer ese compromiso de la Xunta con la ciudad y recordó inversiones como las viviendas públicas de Xuxán, el Novo Chuac o las negociaciones con el Gobierno central para lograr el tren a Langosteira.