El partido de Abascal se debate entre su apoyo a la Corona y las críticas de sus bases más ultras al rey, al que reprochan haber firmado la ley de amnistía o sus palabras sobre la inmigración irregular o Palestina
La salida de Javier Ortega Smith de la dirección entierra definitivamente la influencia liberal en el partido y abre las puertas al dominio «neofalangista» interno, situando a perfiles más jóvenes como imagen exterior para captar ese voto