Expectación para conocer hoy el nombre del vencedor de los recuentos de Florida

CARRERA HACIA LA CASA BLANCA Gore parece decidido a impugnar los resultados si no sale ganador, una intención que divide al Partido Demócrata Como en los partidos más competidos de baloncesto, los comicios presidenciales de Estados Unidos entraron ayer en esa tensa fase en la que se pasan a contar los segundos. En esos momentos críticos de cuenta atrás en los que alguna canasta de tres puntos puede repartir lágrimas y alegría. Hoy, a las cinco de la tarde (once de la noche en España), la secretaria de Estado de Florida, Katherine Harris, decretará el final de un enfrentamiento que dura ya 19 días. Al Gore ha jugado siempre con el marcador en contra y es quien espera que un disparo de larga distancia haga el milagro. Si se produce, hablará el comité de competición.

Gore amenaza con impugnar los resultados de Florida

Si Miami Dade no reanuda el recuento de votos «No pararán hasta que se les acaben los abogados, y no se les van a acabar», observó el líder republicano del Congreso, Richard Amey. En manos de los más fieros picapleitos del país, las elecciones presidenciales de EE UU se han convertido en la versión política de «Kramer contra Kramer», pero en versión más agria, crispada y desagradable. Las huestes de Al Gore demostraron el jueves que están dispuestas a llegar hasta donde sea necesario para ver contados a mano todos los votos en disputa y advirtieron de que impugnarán el resultado de Florida en los tribunales si Miami Dade no se pone manos a la obra.

MERCEDES GALLEGO. Colpisa

Bush se niega a aceptar los recuentos ordenados por el Supremo de Florida

Considera que la resolución judicial supone un robo electoral George Bush no quiere saber nada de recuentos. El Tribunal Supremo de Florida resolvió el martes por la noche (madrugada de ayer en España) que los resultados de los que se llevan a cabo en tres condados sean admitidos en el cómputo final. Pero para el gobernador de Texas, esta resolución es una maniobra más para privarle de la Casa Blanca. Los magistrados, denunció ayer, «cambiaron las normas del juego, y lo hicieron después de que finalizaran las elecciones». Bush sugirió que no acatará la decisión judicial.

Gore medita reconocer su derrota si no vence en el Tribunal Supremo

Bush, por el contrario, parece dispuesto a pelear George Bush y Al Gore se vieron obligados a pasar ayer un día más aparentando que lo que sucede en Florida no va con ellos. Pero cada uno medita en silencio sus próximos pasos una vez que se pronuncie el Supremo de Florida. Gore, al parecer, reconocería su derrota si la sentencia no le es favorable. Bush, por el contrario, estaría dispuesto a continuar la batalla.

Bush despega en los resultados oficiosos de Florida gracias a los votos por correo

CARRERA HACIA LA CASA BLANCA El Supremo decidirá mañana si se tienen en cuenta o no los recuentos manuales Las peculiaridades del proceso electoral floridiano han transformado este año la carrera a la Casa Blanca en una prueba por etapas _las marcadas ahora por autoridades y tribunales_, en la que la ventaja del líder crece, mengua o se mantiene según la intensidad diaria de las pedaladas. Ayer, George W. Bush volvió a destacarse ligeramente. Añadió 630 votos adicionales a los 300 que ya le separaban de su único rival, Al Gore, en el estado de la discordia. La nueva gratificación para el republicano llegó en el paquete de los sufragios por correo procedentes del extranjero. La ventaja ampliada sigue sin garantizarle el triunfo.

«Vota por Gore y pasa página»

Los demócratas perdieron 9.000 votos por dar instrucciones erróneas a sus seguidores Una de las cuestiones más discutidas durante los últimos días entre los equipos de Al Gore y George Bush es si son las máquinas o los humanos el método ideal para contar votos. Los republicanos no quieren saber de nada a mano. Los demócratas han pasado a deplorar las máquinas. Sin embargo, las elecciones en Florida han podido ser decididas por un factor totalmente ajeno al cómputo de sufragios. Los demócratas, según un análisis realizado por «The New York Times», desperdiciaron la ventaja holgada con la que contaban al dar instrucciones erróneas a sus seguidores. Si hubieran utilizado el lema «Vota por Gore, y pasa página», habrían evitado que sus votantes pincharan el nombre de más de un candidato en el mismo folio.

Florida, dispuesta a declarar hoy quién es el vencedor de las elecciones de EE UU

CARRERA HACIA LA CASA BLANCA Los demócratas recurren al más alto tribunal del estado para evitar el anuncio de la secretaria Katherine Harris Los estadounidenses conocerán hoy quién es el vencedor de las elecciones presidenciales en Florida. Al menos ésos son los planes de su secretaria de Estado, Katherine Harris, que ayer anunció que espera disponer al mediodía (seis de la tarde en España) del cómputo de los votos por correo y, a continuación, proceder a certificar los resultados finales. La controvertida Harris decidió dar este paso después de que un juez de Tallahassee, Terry Lewis, resolviera ayer que no estaba obligada a esperar por los recuentos manuales. Los demócratas no dan la batalla por perdida y recurrieron al Tribunal Supremo de Florida para evitarlo.

Un juez rechaza la demanda republicana de suspender el recuento manual en Florida

La secretaria de Estado local se niega a ampliar el plazo del escrutinio, que acaba hoy, por lo que no dará tiempo a revisar las papeletas Los tribunales tuvieron ayer su primera palabra en la disputa que mantienen los dos candidatos a la Casa Blanca, George W. Bush y Al Gore. Un juez federal en Miami, Donald Middlebrooks, rechazó sumariamente el interdicto interpuesto por el republicano con el objetivo de paralizar los recuentos de votos en varios distritos de Florida. Sin embargo, la victoria que se apuntó el equipo demócrata no logró aclarar el panorama. En otra polémica maniobra, la secretaria de Estado de Florida, la republicana Katherine Harris, se negó a ampliar el plazo para revisar las papeletas, por lo que podría no haber tiempo para finalizar los recuentos.

JAIME MEILÁN

El condado de Palm Beach ordena el recuento manual de sus 425.000 votos

Un juez designado por Clinton oirá hoy los argumentos de Bush para detener el proceso El condado de Palm Beach, clave para definir quién será el próximo inquilino de la Casa Blanca, decidió ayer hacer un recuento manual de todos los votos al detectarse en una muestra selectiva nuevos sufragios para Al Gore. Tras la revisión manual la madrugada del domingo de sólo 4.600 sufragios (el 1% del total) se detectaron 36 nuevos votos para Gore y tres menos para George W. Bush. Los demócratas creen que si cuentan a mano los 425.000 sufragios del condado puede cambiar el resultado final de Florida a su favor. Eso si un juez federal de Miami no lo impide hoy, tras la demanda presentada por los republicanos.

MERCEDES GALLEGO. Colpisa

Bush intenta detener en los tribunales el recuento manual de los votos de Florida

Los republicanos justifican la medida diciendo que el escrutinio automático es más justo y más exacto La pugna por los 25 votos electorales de Florida cayó ayer en las simas propias de una republica bananera. El equipo Bush abandonó la vía de la retórica _y de la impaciente espera por los resultados finales_ para intentar asestar el primer golpe desde los tribunales. James Baker, el máximo representante en Tallahassee del gobernador de Texas, anunció la interposición ante un juez federal de un interdicto para impedir que el recuento manual solicitado por los demócratas vaya adelante. Un recuento a mano «no sería más exacto que el automático, sería menos justo y menos exacto», explicó James Baker.

Nuevo México pasa a manos de Bush por 17 votos

El caos amenaza con extenderse a otros estados donde la diferencia es pequeña Si la situación continúa sin aclararse en Florida, en otro estado como Nuevo México, donde las cosas parecían ya decididas, los errores, recuentos y hallazgos de última hora se han encargado de complicar la situación. Según los últimos resultados provisionales, Nuevo México ha pasado a manos de George Bush por una margen de 17 votos. El pasado martes había sido adjudicado a Al Gore.

Republicanos y demócratas, en guerra

CARRERA HACIA LA CASA BLANCA Bush pide a su rival que, por el bien del país, reconozca su derrota, pero éste se niega a tirar la toalla Nadie da el brazo a torcer en la lucha por la Casa Blanca. Los representantes de George Bush exigieron ayer a su rival que reconozca su derrota y deje de incordiar. Las filas demócratas respondieron que nada está decidido. Incluso acusaron al republicano de conducirse «inapropiadamente» por querer proclamarse presidente sin conocer aún los resultados. La guerra verbal se ha recrudecido extraordinariamente. Al Gore ve una eventual victoria en Florida al alcance de su mano. La ventaja del gobernador de Texas se ha visto reducida en este decisivo estado a poco más de 300 votos. Todo está pendiente de nuevos recuentos.

Una papeleta compleja provoca el terremoto político en Florida

Unos 19.000 votos fueron anulados El epicentro de las complicadas evoluciones que se viven en Florida está en el distrito de Palm Beach. Más concretamente, en el modelo de papeleta allí empleado para las elecciones. Los numerosos indicios de errores en el voto, determinantes para el resultado, generaron demandas judiciales y protestas populares.

Gore retrocede al quedar en el aire la asignación de Florida

Bush lleva 217 votos electorales frente a los 172 del candidato demócrata El resultado de Florida, que promete ser determinante, vuelve a estar en el aire, y eso que los primeros sondeos le daban la victoria en este Estado al candidato demócrata. El demócrata Al Gore ganó Pensilvania con 23 votos electorales y que era otro estado esencial en la reñida lucha con el gobernador de Texas, George W. Bush, según los sondeos de las cadenas de televisión. Los analistas consideran que el estado clave ahora es California. Alta participación Hillary gana el escaño por Nueva York El Congreso en juego Bipartidismo

AGENCIAS

Florida decide el presidente

CARRERA HACIA LA CASA BLANCA Estados Unidos despertó ayer como un país dividido y sin saber quién será su presidente a partir del próximo 20 de enero. Al Gore fue el candidato que cosechó más sufragios _en torno a 250.000 más que su principal oponente_, pero era precisamente éste, George Bush, quien contaba con mayores posibilidades de alcanzar la Casa Blanca. Todo está pendiente de lo que suceda en Florida. Sus 25 votos electorales decidirán la contienda. Los resultados iniciales dieron allí la victoria al republicano, pero por menos de 1.700 votos. Tan pírrica diferencia obligó a realizar un nuevo recuento, y a que entraran en juego unos 2.300 votos por correo. GRÁFICO ELECCIONES USA

ARCAÍSMO DEMOCRÁTICO USA

CARRERA HACIA LA CASA BLANCA JAIME MEILÁN, corresponsal de La Voz en Nueva York

EL PAPEL CLAVE DE LA FLORIDA

CARRERA HACIA LA CASA BLANCA JOAQUÍN ROY, catedrático de la Universidad de Miami

Una noche de infarto

Todos culpan a la televisión por las proyecciones equivocadas y las cadenas señalan con el dedo a los sondeos Los políticos y comentaristas culpaban ayer a las cadenas de televisión por dos proyecciones equivocadas que asignaron primero al demócrata Al Gore una victoria en Florida, y luego atribuyeron ese estado clave _y la victoria presidencial_ al republicano George Bush. Y las cadenas de televisión _Fox, CNN, NBC, CBS y ABC_ le achacan el fiasco a Voter News Service, la firma de sondeos de opinión y encuestas a pie de urna sobre cuyos datos se construyeron apresuradamente las proyecciones erróneas. «Lo ocurrido prueba que esos sistemas son muy falibles», afirmó Av Westin, un ex-directivo de ABC News. «Demuestra que la presión por dar la primicia puede ser mal encaminada. Obviamente, alguien se olvidó de los cuidados elementales», añadió.

JORGE A. BAÑALES. Efe

Una decena de estados decidirán el próximo presidente de Estados Unidos

Los últimos sondeos sólo dan una insignificante ventaja a George Bush En la ruleta electoral estadounidense, los candidatos a la Casa Blanca pudieron escuchar hoy, lunes, la inmaterial advertencia que precede al final del juego: '!No va más!'. La fase de las apuestas ha concluído, y llegado el momento de cruzar los dedos mientras se espera por el destino de las 51 bolas en circulación, las de los 50 estados y la del Distrito de Columbia. Tras completar su última, y agotadora, jornada de campaña, Al Gore y George Bush se retiraron a sus respectivos cuarteles generales, en Nashville (Tenneessee) y Austin (Texas), para hacer números y sopesar sus posibilidades de victoria mientras no hablan las urnas.

JAIME MEILÁN

La reñida disputa entre Gore y Bush eleva la participación de los votantes de EE UU

CARRERA HACIA LA CASA BLANCA Los dos candidatos se mostraban confiados en su victoria en las elecciones más igualadas de los últimos cuarenta años Por primera vez en muchos meses, George Bush y Al Gore pudieron descansar ayer. La batalla por el electorado estaba vista para sentencia y la misión de los dos candidatos se redujo a votar y esperar el veredicto. El republicano aseguró que será el próximo presidente de EE UU. El demócrata no se quedó atrás y se mostró confiado en su triunfo. Estas manifestaciones triunfalistas no lograban ocultar la tensión ante las elecciones más reñidas de los últimos cuarenta años. Precisamente esa disputa llevó a más estadounidenses a acudir a las urnas, en algunos casos superando el 70% de los votos, algo que favorecía a Gore.