El PP tiende puentes hacia un PSOE que ve crecer la hostilidad de la Marea

Xosé Vázquez Gago
Xosé Gago A CORUÑA

A CORUÑA

César Quian

El BNG marca el tono del ala izquierda de la oposición pese a tener solo dos ediles

22 may 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

Los cambios políticos que se insinuaban en A Coruña cuando empezaba la primavera se han acelerado detrás del telón de la crisis del coronavirus. Al paradigma de la vieja normalidad se llegó en enero, cuando el PP se quedó solo fuera del pacto presupuestario. La nueva normalidad no se conformará hasta después de las elecciones autonómicas. Pero se insinuó en el pleno de la semana pasada, cuando los populares votaron con el PSOE los temas de calado y ofrecieron apoyo a un plan de reconstrucción económica, mientras la Marea se descolgó en las votaciones y se lanzó contra el equipo de Inés Rey.

El cambio de tendencia se reafirmó estos días, en los que el PP publicó datos de la liquidación del 2019 que prueban el descontrol económico y administrativo del ejecutivo de la Marea, al tiempo que invitó al PSOE a corregir la «anormalidad administrativa heredada» de sus predecesores.

La desconfianza

Gobierno a la vista. El PP ha sabido recolocarse en la pandemia, pero también lo ha hecho la Marea, que con sus movimientos facilitó el tránsito de los populares hacia el grupo de partidos que construyen, los que tienen más posibilidades de ganarse el favor ciudadano en la situación actual.

La tensión entre los socialistas y la Marea creció durante el confinamiento. Las críticas subieron de tono, y se tradujeron en enfrentamientos abiertos en el último pleno, con acusaciones a la alcaldesa y su equipo de «indolencia» o «pasividad» en la crisis.

Casi toda la corporación hace la misma lectura sobre la subida de tensión: la Marea quiere entrar en el gobierno. Su estrategia pasa por ser imprescindible para el PSOE, lo que explica su insistencia en que el PP debe ser excluido o al menos no debe condicionar el plan de reactivación.

El detonante

El pleno de marzo. Pero los socialistas, que en enero no se esforzaron en contar con los populares, ahora insisten en contar con todos. La gravedad de la crisis lo explica. Pero también pesa lo ocurrido en el pleno de marzo. Cuando se votó un cambio urbanístico para sacar adelante el futuro parque del Agra.

El PP se abstuvo. La votación, que requería mayoría absoluta, quedó en manos de la Marea. Podría haber dejado caer el proyecto absteniéndose, pero prefirió marcar postura con un voto en contra y fuertes críticas al PSOE.

Esa decisión desengañó del todo a los socialistas, que comprobaron hasta qué punto era fiable su socio. Atribuyeron la decisión de la Marea a las inminentes elecciones, y a la postura del BNG, que se opuso al plan sin ambages.

El BNG

Más influyente que su peso. No es la primera vez que los dos ediles del Bloque condicionan el voto de los seis de la Marea. Ocurrió en el último pleno. La Marea hizo un discurso para votar contra el PSOE en el punto clave, un cambio en el presupuesto. Hasta anunciaron que no lo apoyarían. Pero los nacionalistas votaron a favor y ellos se abstuvieron.

Lo ocurrido acredita el peso del BNG y de su portavoz, Francisco Jorquera, que mantiene la colaboración con el gobierno local al tiempo que marca la línea del ala izquierda de oposición.

 El escenario futuro

Geometría variable. Todo pasa por las autonómicas. Sin una coalición de izquierdas en la Xunta, es difícil que se vuelva a enero, con un bloque sólido PSOE-Marea-BNG, Ciudadanos aliado y el PP aislado. Es más, en María Pita se da por hecho que si Feijoo repite el choque de la Marea con Rey y su equipo se disparará.

También es difícil una pinza entre la Marea y los populares. Antes del coronavirus tenían contactos. Pero es difícil que un partido que promulga la desaparición política de otro, como hizo la Marea con el PP en el pleno, consolide una alianza.

Así, la nueva normalidad será la geometría variable. La que deberá buscar el PSOE para lograr apoyos puntuales en cada pleno.

La Marea pide al Gobierno la renta básica universal

La Marea Atlántica hizo ayer público un comunicado en el que insta al Gobierno central a implantar una renta básica universal destinada a «toda a cidadanía e sen condicións». La Marea dice que es una «ferramenta ambiciosa» con capacidad para «?erradicar tanto a pobreza e as desigualdades ocasionadas pola crise sanitaria da covid-19 como as xa existentes». La Marea mostró además su apoyo a las medidas del Gobierno para apoyar a colectivos afectados por la pandemia.

Los populares ven «muy próximo» un acuerdo para aprobar el plan de rescate económico

El gobierno local y los representantes del grupo municipal del PP mantuvieron ayer una reunión para estudiar el futuro plan de reactivación económica tras la epidemia del coronavirus. Fuentes populares consideraron que el acuerdo está «muy próximo». El PP valoró la «voluntad de diálogo» por parte del gobierno socialista para llegar a un consenso.

El ejecutivo del PSOE mantiene negociaciones con todos los grupos para intentar cerrar un acuerdo antes de que acabe el mes. Desde el PP se señaló que, tras la reunión bilateral de ayer, «la propuesta de altas y bajas» del presupuesto, «recoge muchas de las iniciativas de ayuda social, conciliación, apoyo para autónomos y pymes y dinamización comercial y hostelera» que el grupo popular ha presentado en la comisión de seguimiento que se mantuvo activa durante el período de confinamiento por el virus.

El PP añadió que, «en términos generales», valoran las iniciativas incorporadas a propuesta de los demás grupos políticos, por lo que esperan que «en los próximos días» se pueda concretar un documento consensuado que se llevaría a pleno «antes de finalizar el presente mes de mayo».

Ese es el calendario que maneja José Manuel Lage, portavoz del gobierno y concejal de Facenda, que la semana pasada anunció que ya se habían liberado 4,4 millones de euros para impulsar el plan. En total, el gobierno local estima que el documento superará los 11 millones de euros, que se financiarán mediante el remanente de ejercicios anteriores y la reasignación de partidas del presupuesto de este año. Es el caso de los 500.000 euros que se iban a destinar a la Tall Ships Race, que se ha tenido que retrasar hasta el próximo año.

La Marea pide al Gobierno la renta básica

La Marea Atlántica hizo ayer público un comunicado en el que insta al Gobierno central a implantar una renta básica universal destinada a «toda a cidadanía e sen condicións». La Marea dice que es una «ferramenta ambiciosa» con capacidad para «erradicar tanto a pobreza e as desigualdades ocasionadas pola crise sanitaria da covid-19 como as xa existentes». La Marea mostró además su apoyo a las medidas del Gobierno para apoyar a colectivos afectados por la pandemia.