
Dicen que es la comida más importante del día y donde se encuentra buena parte de la diversidad culinaria de nuestro país. Del recurrente y transversal chocolate con churros a la horchata, el pan con tomate y la bica de Trives
02 may 2022 . Actualizado a las 17:21 h.Que el desayuno es la comida más importante del día es un mantra que se repitió durante años, y que hoy algunos expertos ponen en duda. Pero lo que pocos discuten es que, de viaje, hay pocos placeres semejantes a pegarte un banquete de buena mañana, bien sea de buffet libre de hotel o en cualquier cafetería local antes de comenzar la jornada de turismo. España, tan heterogénea en su gastronomía, cuenta con una variedad de platos que son la envidia del resto del planeta, y en este saco entran también entran los desayunos. Habitualmente denostados por los talents de cocina, que dictan sentencia para el gran público en lo que a gastronomía se refiere, y carentes de valor para muchos chefs, solo encuentran voz en las redes sociales, donde las fotos de tostadas con aguacate y de exquisitos dulces copan Instagram el fin de semana: desde una red velvet a una carrot cake pasando por unos muffins.
Lo cierto es que estas estampas distan, y mucho, de la realidad de los desayunos en nuestro país, más plagados de churros y porras, pan amb tomàquet (pan 'tumaca') y tostadas con mantequilla y mermelada. Damos una vuelta por diferentes zonas de España para conocer y reivindicar la espléndida oferta gastronómica que tenemos a nuestro alcance y que, en muchas ocasiones, es una consecuencia natural de nuestra historia.
Bollo preñau y casadielles
En Asturias se explota hasta a primera hora uno de sus reclamos gastronómicos más conocidos: el bollo preñau. En bares y cafeterías es frecuente encontrarse con este bocadillo en formato mini para acompañarlo de un café. Del mismo modo, los más golosos pueden optar por acercarse a una confitería y disfrutar de unos casadielles. Este dulce es una especie de empanadilla dulce rellena de nuez, azúcar y anís. Típicos de carnaval, sin embargo, pueden encontrarse prácticamente todo el año.
Llonguets, sobrasada y ensaimadas

En Baleares, la cocina payesa nos deja un buen abanico de opciones para desayunar. Los llonguets, unos panecillos ligeros y de un tamaño pequeño, son perfectos para acompañar de sobrasada, o cualquier embutido de la zona, y siempre con aceite y tomate. Los amantes del dulce están de suerte porque encuentran en Mallorca el reino de las ensaimadas, que con un buen café arreglan cualquier comienzo de día regulero. Si quieres lanzarte a la mejor, puedes acercarte a Forn Sant Francesc, que el pasado año consiguió el premio Mejor Ensaimada del Mundo.
Sobaos y quesadas pasiegas
El mediático presidente de Cantabria, Miguel Ángel Revilla, ha conseguido con sus intervenciones televisivas que ni un español se quede sin conocer las bondades de las quesadas pasiegas y los sobaos. La primera mención a la quesada se encuentra en el Libro del Buen Amor del Arcipreste de Hita, y se trata de un dulce que, en su origen, se preparaba con queso pasiego fresco, dando lugar a una suerte de tarta de queso al horno. Sobre los sobaos sobra prácticamente cualquier explicación pues, seguramente, hayan sido parte fundamental de los desayunos de la mayoría de los niños de los 80 y 90 en su formato industrial que, junto al resto de bollería, tantos quebraderos de cabeza genera a los nutricionistas.
Pan con mantequilla y el desayuno andaluz

El pan con mantequilla es el más humilde y rico de los desayunos que a menudo consumen infinidad de españoles. En Soria este producto es de excelentísima calidad por el uso de la leche de ganaderías de la zona, especial por la particularidad agroclimática de la zona. Con sal o dulce, lo mejor es hacerse con una buena hogaza de pan para disfrutar este manjar.
Acompañar un buen pan con una grasa vegetal es un recurso muy typical spanish. El conocido como desayuno andaluz es evidente donde se consume, y consiste en agregar aceite de oliva y azúcar a una tostada de pan. El origen está en el excedente de aceite de la zona, que había que aprovechar en épocas de escasez alimentaria. Como curiosidad, el día 28 de febrero, Día de Andalucía, los colegios sirven este plato a los niños como almuerzo.
Fartons, horchata y longaniza
En el municipio de Alboraya, en Valencia, nacen los fartons, un dulce típico de la zona, ligero y esponjoso que, aunque puede acompañarse de un café o chocolate a la taza, muchos valencianos lo toman, cómo no, con horchata, esa bebida procedente de la chufa que vale para un roto y un descosido, sobre todo en verano, en la costa levantina. Los amantes de desayunos contundentes tienen en Requena una parada obligatoria, donde la longaniza nunca tiene un momento malo para ser consumida.
Churros y porras

Aunque el 'Madridcentrismo' obliga a pensar que solo en la capital se toman callos, bocata de calamares y chocolate con churros, lo cierto es que se trata de platos con renombre prácticamente en toda España. Si acaso, son las porras las que sí desprenden ese aura castizo. Más gruesas y esponjosas (y también más laboriosas a la hora de prepararlas), son el desayuno de los campeones de quienes no temen al colesterol. Los churros se hicieron famosos en Madrid gracias a la chocolatería San Ginés (que aparece mencionada en Luces de Bohemia, de Valle Inclán), una cafetería de finales del siglo XIX que está a reventar llueva, llegue Filomena o haga sol. Como dato apuntar que la cocina china tiene su réplica en los youtiau, y aunque todavía no está claro si apareció antes el huevo o la gallina, todo parece indicar que la versión asiática es la original.
Queso del país, bica y café de pota
Tapado con un paño de tela y atemperado unos minutos, el queso del país es un chute de energía para empezar el día en muchos hogares gallegos. Como en dulces típicos no andamos escasos, en la comunidad más de uno no pasa sin su bocadito de rigor, ya sea en forma de bica de Trives, melindres y, durante el invierno, filloas. Para muchos lo ideal es acompañar estos platos de un buen café de pota, pero la engorrosa elaboración y el tiempo necesario para disfrutarlo hace que muchos tiren de café de cápsula o cafetera italiana y tan contentos.