Rueda iniciará con la regidora de Santiago su ronda de contacto con los alcaldes y abordarán la tasa turística

Tamara Montero
Tamara Montero SANTIAGO / LA VOZ

GALICIA

PACO RODRÍGUEZ

«Non ten sentido telo aí sen tomar nunca ningunha decisión», ha reconocido el presidente de la Xunta, aunque es un asunto que «hai que madurar moito»

02 sep 2023 . Actualizado a las 16:45 h.

El presidente de la Xunta, Alfonso Rueda, iniciará con la alcaldesa de Santiago, Goretti Sanmartín, la ronda de contactos con los regidores municipales que así lo han solicitado, una ronda de contactos que, según los planes, tendrá lugar entre septiembre y octubre.

Una reunión con Goretti Sanmartín en la que, el próximo 2 de octubre, se abordará la posibilidad de implantar la tasa turística, que Compostela lleva reclamando un tiempo. «Este é un tema importante», ha remarcado el presidente de la Xunta, que dice que llegará al encuentro con una «opinión formada» sobre esta cuestión al encuentro con la alcaldesa de la capital gallega aunque de ella es posible que no salga una decisión en firme sobre la cuestión.

La cuestión de la implantación de una tasa turística trasciende lo local, ya que «afecta a toda Galicia», ha terciado el presidente de la Xunta. «Non ten sentido telo aí sen tomar nunca ningunha decisión», ha reconocido Rueda, aunque «hai que maduralo moito» y tener en cuenta el contexto, incluyendo por ejemplo la regulación de las viviendas de uso turístico, una cuestión para la que Santiago «debería ter unha postura definida».

Rueda ha aprovechado las preguntas de los periodistas para criticar que aun siendo una cuestión importante y para la que la Xunta ha hecho peticiones reiteradas en el tiempo de documentación, el gobierno compostelano no la ha remitido hasta hace unas tres o cuatro semanas, a principios del mes de agosto.

«Tivemos un magnífico ano turístico e eu pretendo seguir crecendo», ha dicho el presidente de la Xunta, aunque creciendo con «sentidiño e dun xeito sustentable». De todo eso hablará con la alcaldesa de Santiago, aunque no ha revelado la fecha exacta en la que se producirá ese primer encuentro de la ronda de contacto con los regidores gallegos, aunque su intención es que se produzca este mismo septiembre.

Santiago estudia un gravamen para los excursionistas que llegan en buses a la dársena de Xoán XXIII

El Concello busca alternativas paralelas a la tasa turística, aplicable por pernoctaciones

Emma Araújo

El gobierno de Santiago está analizando distintas opciones para conseguir ingresos por vía directa de excursionistas que visitan la ciudad y que no pernoctan, ya que a este perfil de visitante no se le puede aplicar la tasa turística. Así lo avanzó ayer la alcaldesa, Goretti Sanmartín, que tras la Xunta de Goberno incidió en la necesidad de establecer un modelo de tasa al que puedan sumarse los concellos de Galicia que así lo deseen.

La opción que Santiago plantea para que el turismo de un solo día también contribuya por vía directa al sostenimiento de los servicios básicos de la ciudad pasa por establecer algún tipo de gravamen para los autobuses que trasladan a visitantes a la zona histórica y estacionan en la dársena de Xoán XXIII.

Esta tarifa puede aplicarla el Ayuntamiento sin necesidad del visto bueno autonómico, por lo que los servicios jurídicos y técnicos de Raxoi ya están trabajando en esta posibilidad, a la espera de que el Concello y la Xunta analicen la propuesta compostelana para la tasa turística y sobre la que, hasta el momento, no hay acuerdo entre ambas administraciones. Goretti Sanmartín considera que este es un tema de «máxima urxencia», por lo que aguarda una pronta respuesta de la Xunta. En este sentido, la regidora señaló que al enviar la propuesta de Raxoi para implantar la tasa turística confía en que la reunión solicitada con Alfonso Rueda, presidente de la Xunta, pueda permitir un debate y una negociación a partir del documento, y así ganar tiempo para su estudio mediante una proposición no de ley en el Parlamento gallego.

Sanmartín señala que la aplicación en Santiago de una tasa turística es una opción que la población apoya de forma muy mayoritaria y señala que las ciudades que ya la están cobrando no han visto mermada su actividad turística ni los ingresos vinculados al sector. Los fondos que se recaudarían con esta fórmula podrían servir, según desgranó la regidora, para reforzar los servicio de limpieza, la rehabilitación del patrimonio, mejorar la seguridad y también para trabajar en un cambio de modelo turístico que apueste por la desestacionalización y también para dar a conocer atractivos de la ciudad que están alejados de las rutas habituales que masifican varias calles del casco histórico.

Con el debate en una fase embrionaria, la alcaldesa espera que la Xunta apueste por la implantación de la tasa turística y se abra una negociación a partir del documento enviado por Santiago, del que es consciente que sufrirá modificaciones para llegar a un acuerdo que pueda ser refrendado por el Parlamento. A este respecto, el director de Turismo de Galicia, Xosé Merelles, señaló ayer en un acto en Santiago que la respuesta al documento compostelano será «rápida» y afirmó que en él se recogerán alternativas al modelo que plantea el gobierno de Goretti Sanmartín.

La portavoz de Aviturga apuesta por abordar todas las opciones para compensar cortas y largas estancias 

o.p.

Estrella Ferreiro, portavoz en Santiago, de la Asociación de Viviendas Turísticas de Galicia (Aviturga), también apuesta por un debate para analizar la viabilidad de la tasa turística o de otro tipo de tarifas que pueda aplicar el Concello, aunque señala que la posibilidad de establecer esta tasa no se ha abordado formalmente en la asociación: «Yo personalmente no estoy en contra de ella: si el turismo puede generar unos ingresos que ayuden a la ciudad a paliar deficiencias ocasionadas por la presión turística no me parece mal».

Ferreiro entiende que debería diseñarse adecuadamente y estudiando con detenimiento la situación. Porque señala que se grava a quien pernocta, cuando puede generar más gasto en servicios públicos quienes «llegan, toman una cerveza y se marchan. Yo creo que esos manchan más que quienes están en una vivienda turística o en un hotel, porque estos últimos no comen por la calle. No sé si es muy lógico que se cobre a quienes pernoctan y ya generan más beneficios para la ciudad en cierta medida». Reclama en esa línea un estudio más detenido de la tasa.