El Gobierno germano teme que los medios de comunicación del grupo pasen a manos de Rupert Murdoch o de Silvio Berlusconi El grupo de medios de comunicación alemán Kirch, propietario de los derechos de televisión de los mundiales de fútbol de este año y del 2006, presentó ayer suspensión de pagos en Munich acosado por una deuda de 6.500 millones de euros, en lo que ha sido la quiebra más importante registrada en Alemania desde la II Guerra Mundial. Tras el desconcierto que se apoderó del país ayer por la mañana, a media tarde los acreedores de la compañía se mostraban optimistas sobre el futuro del consorcio, que no será fragmentado. Igualmente se comprometieron a salvar la mayor parte de los 5.500 puestos de trabajo vinculados a KirchMedia.
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