La Autoridad Portuaria presentó a la sociedad civil la conexión ferroviaria al puerto exterior, un proyecto por el que se calcula que de cada euro invertido se puede obtener «hasta un 8 % más»
19 abr 2022 . Actualizado a las 09:22 h.La conexión ferroviaria al puerto exterior que está actualmente en fase de licitación fue presentada este lunes formalmente en un acto a representantes de la sociedad civil coruñesa. La magnitud física y económica de esta obra llevó a la Autoridad Portuaria a trasladar a representantes de diversos sectores de la ciudad y su entorno las principales características de estos trabajos y las repercusiones laborales, económicas y sociales que tendrá para A Coruña.
Más de un centenar de invitados de empresas, Administraciones, trabajadores portuarios y otros sectores se dieron cita ayer en Palexco para atender a las presentaciones formuladas por el presidente de la Autoridad Portuaria, Martín Fernández Prado; el director general del ADIF Alta Velocidad, Juan Pablo Villanueva; el catedrático de Ferrocarriles de la Universidade da Coruña, Miguel Rodríguez Bugarín; y el director del Instituto Universitario de Estudios Marítimos, Fernando González Laxe.
Todos ellos dejaron clara la relevancia que tendrán los 6,7 kilómetros de línea ferroviaria que conectarán las instalaciones de punta Langosteira con el Eje Atlántico. «Este tipo de obras son complicadas y difíciles, estando todos juntos el éxito está garantizado», explicó el presidente del Puerto, quien agradeció el trabajo realizado desde el 2010 por las Administraciones implicadas para llegar a la licitación de la conexión ferroviaria. Además, Fernández Prado destacó la importancia de que estuviese «toda la sociedad detrás, incluidas las asociaciones de empresarios, esto nos dio la fuerza para estar hoy aquí».
El director general del ADIF se encargó de detallar en qué consistirán las obras del enlace ferroviario y diversas particularidades técnicas, pero también señaló que estos 6,7 kilómetros supondrán que el puerto exterior pueda «pertenecer a los elementos más estratégicos de la red transeuropea» de transporte de mercancías.
Esto permitirá fomentar una modalidad que actualmente se ve superada por los tráficos marítimos o por carretera de cargas, pero que en los próximos años está llamada a crecer de manera considerable.
Esta conexión, que se espera que esté lista en el 2026, hace que ya se esté trabajando con ese horizonte temporal para tener todo preparado cuando se acaben las obras.
A la Autoridad Portuaria se le abrirá un nuevo panorama que redundará en beneficios para la sociedad coruñesa por la generación de riqueza que permitirá al poder llegar más lejos y de una manera más eficiente. «Vamos a tener una especie de autovía ferroviaria que va a dar la posibilidad de desarrollar nuevos tráficos, que es la estrategia que siguen Barcelona u Oporto», aseguró Miguel Rodríguez Bugarín, quien detalló que estos dos puertos llegaron a acuerdos con «terminales en tierra» como Zaragoza y Salamanca, respectivamente, para ampliar su negocio. «Ahí es donde el transporte ferroviario debe dar ese punto añadido para permitir mayor rentabilidad y eficiencia», añadió.
Esta es una de las principales puertas que se le abren al Puerto de A Coruña con el tren, que podrá ampliar su hinterland (zona de influencia). Su presidente destacó que el ferrocarril permitirá «traer nuevas mercancías y trabajar con nuevos operadores», generando «muchas posibilidades para las empresas en un ámbito muy amplio».
Efectos de la inversión
El ámbito empresarial será uno de los más beneficiados cuando esté operativo el tren a punta Langosteira y así lo detalló Víctor Nogueira, presidente del Grupo Nogar, y quien está en pleno traslado de su actividad al puerto exterior. «Entendimos que exigía un movimiento valiente de apostar por ello, primero con recursos propios, pero también para que se produzca un efecto llamada», explicó Nogueira, quien detalló que «sería una barbaridad seguir adelante sin la seguridad de contar con la conexión ferroviaria» y aventuró que el tren permitirá que Langosteira se convierta en una suerte de «polígono industrial».
Por su parte, Fernando González Laxe declaró que «el puerto es la savia del ferrocarril» y aseguró que «la inversión genera efectos económicos muy positivos y por cada euro invertido le vamos a sacar un 4 o un 8 % más». «Un puerto es una empresa, no es un lugar de mediación como lo fue hace bastantes años. Tiene que tener tres grandes funciones: captar mercancías, competir e insertarse en la red de transporte», destacó el expresidente de la Xunta.
El transporte de mercancías por ferrocarril es un sector llamado a crecer en los próximos años
Actualmente, el transporte de mercancías por ferrocarril se encuentra a gran distancia de la competencia marítima y por carretera en toda la Unión Europea, una diferencia todavía más acentuada en España, donde apenas representa el 3 %.
Sin embargo, hay varios aspectos que favorecerán su crecimiento en los próximos años y de ahí que la alternativa elegida para el puerto exterior se entienda que va en la dirección correcta. «Se liberalizó el sector antes en mercancías que en viajeros y esto sirve para activar la competencia, uno de los mecanismos de mejora. Otro es conseguir una red especialmente preparada para los trenes de mercancías, que son los corredores», explicó el catedrático Miguel Rodríguez Bugarín.
Ahí A Coruña no tiene problema, ya que forma parte del Corredor Atlántico, que la conecta con toda Europa y permitirá el traslado de mercancías a cualquier punto del continente. «Esta obra nos va a dar la plena operatividad en Langosteira. El tren va a ser imprescindible y nos permite estar entre los mejores de Europa en calados y terminales», aseguró Martín Fernández Prado. «El ferrocarril puede transportar grandes mercancías y la vía marítima es la que nos abastece», dijo González Laxe.
Eficacia y sostenibilidad, dos de las claves que favorecen al tren al puerto exterior
La importancia de las cuestiones ambientales en la actualidad y para el futuro obligan a que las grandes apuestas también se ajusten a criterios de sostenibilidad y eficiencia, dos factores que ofrece el ferrocarril.
«El transporte ferroviario es sostenible, fiable y seguro. Es uno de los caballos de batalla de la Unión Europea, porque genera solo el 0,5 % de las emisiones de dióxido de carbono del transporte, por eso va a ser impulsado en los próximos años», aseguró Miguel Rodríguez Bugarín.
La sostenibilidad que ofrece el ferrocarril fue uno de los aspectos más destacados durante la presentación de la conexión a punta Langosteira y las palabras de Fernando González Laxe así lo reflejaron. «No se pueden dejar abandonadas la sostenibilidad y la participación, con una perspectiva de durabilidad y de no dejar una losa a siguientes generaciones», destacó.
Juan Pablo Villanueva, director general del ADIF, también puso de relieve que las cuestiones ambientales fueron muy importantes durante todo el proceso de diseño y redacción del proyecto del tren al puerto exterior, y explicó que se tendrá en consideración la posibilidad de emplear los materiales que se extraigan del terreno «para fabricar hormigón».
El Puerto se encuentra inmerso en el desarrollo del Coruña Green Port para la captación de energías verdes en la infraestructura de punta Langosteira, y Fernández Prado comparó la llegada de grandes empresas energéticas en la década de 1960 con el futuro a corto plazo. «Ese tren permitirá reindustrializar el entorno metropolitano», indicó.
El respeto por el medio ambiente y la sostenibilidad son cuestiones ya muy actuales y así lo demuestran las instalaciones que está desarrollando Galigrain en el puerto exterior. «Reducimos el impacto de la huella de carbono con un sistema de cintas y está la posibilidad de alimentarnos con energías renovables, vamos hacia una operativa puntera en el mundo», dijo Nogueira.
