«Daquela estaba máis alá que aquí», recuerda Juan Carlos Agustín Espasandín. Entró en el quirófano del Chuac in extremis y salió con un latido de titanio. Hoy, ya trasplantado, lleva una vida «medianamente boa» en Vimianzo. «¡Que en dez anos poidamos volver a contalo!», dice
Por contenido, escenografía y música, tiene una ineludible cita teatral este sábado en Vimianzo. Se trata de la obra «El nadador de aguas abiertas». Hablan Markos Marín y Adolfo Fernández