Las principales capitales del mundo se volcaron en recibir con espectáculos de fuegos artificiales el año 2001 Los astronautas de la Estación Espacial Internacional han sido los humanos que más veces recibieron el nuevo año, siglo y milenio. En total fueron quince veces, aunque ni siquiera pudieron tomar una de las 180 uvas que les correspondían ni descorcharon una sola botella de champán. Pero, como ya es tradición espacial, brindaron con coñac que las tripulaciones suelen llevar a hurtadillas. Con los pies en la Tierra, todo el planeta cambió los dígitos del año con grandes fiestas, en las que imperó el frío y la lluvia. A pesar de ello, las capitales gastaron todo su arsenal pirotécnico en empezar el 2001 con buen pie.
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