Vídeos submarinos de cigalas abren una ventana para volver a pescarlas en Galicia

Cuando los científicos del Consejo Internacional para la Exploración del Mar (ICES) proponen prohibir la pesca de cigala otros tres años más en un área situada entre Fisterra y Cariño, sus colegas del Instituto Español de Oceanografía (IEO) acaban de abrir una ventana que cambia el modelo de estimación de la abundancia de ese preciado crustáceo y que podría permitir volver a capturarlo en Galicia. «Por primera vez», la evaluaron grabándola con un trineo fotogravimétrico. Vídeos submarinos que mejoran la precisión al cuantificarlas en su medio.

Sedentarias, las cigalas pasan la mayor parte de su vida en madrigueras que construyen en fondos de arena y fango. Por ese comportamiento subterráneo fluctúan las capturas. Este método de cálculo de la abundancia se completa con las campañas científicas. Ninguno de ellos refleja posibles «cambios importantes» en las poblaciones de ese tipo de crustáceo, apuntan desde el IEO en un comunicado. Si las descargas de la flota «producen un sesgo en la evaluación analítica», las prospecciones científicas convencionales «no tienen por qué ser necesariamente indicativas de la abundancia».

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e. abuín

Los vídeos submarinos, «evidencias científicas del estado de los fondos» donde se pesca cigala en Galicia, «permitirán poner a punto la metodología» del ICES para estimar cuánta hay en la unidad funcional 25, zona localizada entre la Costa da Morte y Ortegal. Desde el IEO añaden que esa novedosa campaña exploratoria está previsto completarla con otras anuales, coordinadas por Isabel González-Herraiz, del Oceanográfico de A Coruña, dentro del proyecto Isunep25.

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e. a.

Su principal objetivo será calcular los recursos de cigala, «independientemente de la pesquería, determinar el estado de explotación y aconsejar opciones de captura». Una vez consolidados, los resultados serán empleados para decidir en el ICES.

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Las imágenes que quizá marquen un antes y un después en las posibilidades de capturas de ese añorado marisco en Galicia han sido tomadas desde el buque oceanográfico Miguel Oliver, dentro de la sexta campaña Descarsel. Liderada por investigadores del Oceanográfico de Vigo, con Julio Valeiras como jefe, se prolongó durante 12 días en el litoral gallego.

Entre otros, probaron prototipos diseñados para que los delfines que caigan accidentalmente en redes de arrastreros de fondo puedan salir. Y comprobaron que mejorar la selectividad con ese arte «no es fácilmente alcanzable a corto plazo», pese a todas las innovaciones en copos y dispositivos para minimizar capturas no deseadas.

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