A favor de la presencia de aves en las ferias: «Se non as hai, pode crearse un mercado negro»

GANADERÍA

Los organizadores del certamen de Parga aseguran que la venta se hace con respeto a las condiciones de seguridad alimentaria y que sin animales el futuro es poco halagüeño
12 mar 2025 . Actualizado a las 10:08 h.La presencia de aves en ferias como la de Parga está actualmente prohibida. Las restricciones derivadas de la gripe aviar han desembocado en esa medida, contra la que muestran su rechazo organizadores y vendedores. Un nuevo argumento trasladado este martes es que la ausencia de aves no implica que no haya ventas: «Se non as hai pode crearse un mercado negro», dijo Xesús Barreiro, presidente de la asociación de propietarios del campo de la feria, que organiza los dos certámenes mensuales de la villa.
Para Barreiro, las aves que se llevan a la feria se comercializan con las debidas condiciones. En primer lugar, los vendedores están inscritos en un registro de Medio Rural, condición imprescindible para poder vender. En segundo, hay un registro de entradas y de salidas, con lo que se sabe qué ventas se realizan. En tercero, la feria se lleva a cabo con una serie de medidas sanitarias: por ejemplo, se coloca en el suelo un plástico sobre el que se ponen las jaulas con los animales. Por otro lado, los vendedores que acuden a la feria tienen un puesto fijo y unos y otros respetan esa distribución.
Además Barreiro recalcó la importancia de la presencia de la ganadería, aunque sea con pequeños volúmenes, como una aportación indispensable para que las ferias conserven su poder de convocatoria. «Se non hai animais, isto morre nun ano», aseguró. También la agricultura inyecta, al menos en esta época del año, animación y actividad comercial. En estas semanas, comentó, es habitual la presencia de vendedores de plantas al acercarse el período de preparación de huertos familiares. Los vendedores no solo son de la comarca y en algunos casos proceden de zonas alejadas; los compradores no solo son del municipio de Guitiriz, sino que resultan frecuentes las excursiones con visitantes.
«Pequenas cousas que dan vida»
El presidente de la asociación de propietarios advirtió de que la celebración de las ferias es particularmente necesaria en pequeñas localidades, que así gozan de una animación que no se ve a diario. «Estas pequenas cousas son as que dan vida», recalcó. El colectivo está a la espera de reunirse con los grupos presentes en el Parlamento gallego, a quienes expondrá la situación causada por la prohibición de vender aves en las ferias, pero también demandará otro apoyo: Barreiro cree necesario que la Xunta desarrolle alguna iniciativa para dar más promoción a las ferias de villas como Parga. Aunque entre unas y otras, dice, ya hay ahora un espíritu de colaboración, resultaría conveniente que la Xunta diera pasos para hacer de las ferias un reclamo turístico.