Rubén Santamarta
Trasladados a unas hipotéticas elecciones autonómicas los resultados de las generales de este domingo, el Parlamento de Galicia que saldría del fragmentado panorama dibujado ayer en la comunidad apunta a una cámara con seis partidos, con un claro viraje hacia la izquierda. Sería una cámara liderada por los 28 escaños del PSdeG, el doble de los que tiene ahora, convertido en primera fuerza, y que podría pactar un gobierno con los afines de Podemos (12 diputados obtendrían en esa simulación, dos menos que ahora), sumando 40 de los 75 parlamentarios.
Por detrás de los socialistas, el PP, con 24 actas, frente a las 41 actuales; sería el peor resultado que se recuerda en la comunidad para los populares, sobre todo tras diez años de mayorías absolutas con Feijoo al frente. Y con cierta competencia en el centroderecha, algo que no existe ahora en O Hórreo. Pero sin posibilidad de llegar a un acuerdo numérico viable para mantener el gobierno gallego, en el que está desde la primavera del 2009.