La industria del videojuego es heredera natural de las películas y busca, cada vez más, reproducir el realismo cinematográfico y ahondar en la profundidad de las historias.
El proyecto ha sido promovido desde Galicia por Continental Producciones, la única compañía gallega autorizada para desarrollar productos para la multinacional Nintendo.
La ola de incidentes de este tipo ha llevado a los responsables de la empresa a contratar psicólogos y hasta monjes budistas para que realicen ceremonias para ahuyentar «malos espíritus».