El 70 % de los buques de más de 500 toneladas se despiezan en países en vías de desarrollo, donde es más económico, pero con elevadas consecuencias medioambientales y en los derechos de los trabajadores
Entre las nuevas aportaciones del plan destaca el establecimiento de un sistema de vigilancia y custodia del territorio que implica una mayor presencia de los agentes medioambientales