Los cambios llegan tras la salida de Izquierda Democrática, que anunció la semana pasada la ruptura del tripartito en respuesta al cierre de la radiotelevisión pública
Atenas trata de persuadir a sus acreedores internacionales de los avances realizados en materia de reformas para que desbloqueen el tramo de 31.500 millones de euros, pendiente desde junio, para que el país no caiga en suspensión de pagos.