Luchar contra las crisis demográfica, para, al menos, hacer posible que no emigren más jóvenes y que el envejecimiento y la dispersión cuenten a la hora de repartir los fondos estatales y comunitarios fue calificado de objetivo prioritario por los seis presidentes. «El declive demográfico es la mayor amenaza a la que deben de hacer frente nuestros territorios para mantener nuestro modelo de bienestar», llegó a señalar Feijoo, tras aludir el presidente asturiano, Javier Fernández, al «invierno demográfico» que padece el noroeste, o la despoblación del rural y la marcha de los jóvenes que lamentó su homólogo de Castilla y León, Juan Vicente Herrera.
La presencia en el acto de los presidentes de la región Norte de Portugal, Fernando Freire da Sousa, y Centro del mismo país, Ana Abrunhosa, sirvió para que la macrorregión eleve su discurso de unidad y cooperación territorial también al ámbito europeo justo en un momento en el que varios de los líderes regionales reconocieron ayer el derrumbe que sufre las UE y su desconexión con la población.