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La flota gallega confía en que no le afecte el recorte de espada en el Atlántico sur

Somos Mar REDACCIÓN / LA VOZ

PESCA Y MARISQUEO

Tripulantes de un pesquero de Orpagu izando a bordo un pez espada, el emblema de los 72 palangreros de superficie asociados a la organización que preside Joaquín Cadilla
Tripulantes de un pesquero de Orpagu izando a bordo un pez espada, el emblema de los 72 palangreros de superficie asociados a la organización que preside Joaquín Cadilla orpagu

Cuenta con mantener su cupo porque otros países no capturan los suyos

23 nov 2022 . Actualizado a las 05:00 h.

Antes de tasas e impuestos, el kilo de pez espada se está pagando este año en las lonjas gallegas a medias de 7,72 euros, 20 céntimos más que en el 2021, cuando se comercializaron casi el doble de las 555 toneladas de lo que va del 2022, según datos oficiales de la Consellería do Mar. Palangreros de superficie de A Guarda, Vigo, Marín, Celeiro y Burela capturan parte de ese gran migrador en aguas gestionadas por la Comisión Internacional para la Conservación del Atún Atlántico (Iccat), cuya reunión anual acabó el lunes en Vale do Lobo, en el Algarve portugués. Ahí se acordó mantener la cuota de pez espada en el Atlántico norte en 13.200 toneladas y rebajar la del Atlántico sur de 14.000 a 10.000 para los próximos cuatro años. Ahí, pese al recorte, la flota gallega confía en seguir pescando lo mismo que hasta ahora porque cuenta con que se mantenga la tendencia de los últimos años, cuando barcos de otros países no capturaron el que podrían, explica José Manuel Fernández Beltrán, técnico de la Organización de Productores Pesqueros Puerto de Burela.

Los palangreros españoles pueden pescar este año 5.616 toneladas de espada en el Atlántico norte, cantidad que conservarían en el 2023, a la espera de ajustes. Y en el sur, según los datos del Ministerio de Pesca, el cupo ajustado son 4.786 toneladas. A expensas del volumen de capturas de algunas de las otras 47 partes representadas en la Iccat, donde la UE es una en nombre de los Veintisiete, serían las opciones que esperan mantener los próximos cuatro años.

Túnidos tropicales

Desde la Iccat explican en un comunicado de prensa que en la reunión celebrada en Portugal «no se han logrado avances» sobre los túnidos tropicales, que interesan a los cerqueros congeladores españoles. En nombre de los 52 que representa la Organización de Productores Asociados de Grandes Atuneros Congeladores (Opagac), reclamaba una subida de la cuota de patudo a 75.000 toneladas, pero se mantendrán las 62.000 actuales, y las de rabil seguirán siendo 110.000. Tampoco consiguió que se redujeses de 72 a 45 días anuales la prohibición del uso de dispositivos concentradores de peces (FAD, por sus siglas en inglés).

Desde el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación apuntan en una comunicado su propósito de continuar «trabajando para que se reconozcan las especificiades de la pesquería de patudo en las islas Canarias y para que se reduzca el período de veda, garantizando la sostenibilidad de la flota de cerco».

Atún rojo del Atlántico

«Por primera vez en la historia», señala la nota oficial de la Iccat, en el encuentro en Portugal acordó un procedimiento de ordenación del atún rojo del Atlántico, una «medida inédita» con la que pretenden garantizar «una pesca sostenible y rentable a largo plazo» de los recursos de gran migrador en el Atlántico oeste y este y en el Mediterráneo. En estos dos últimos la cuota anual para todas las partes se ha elevado de 36.000 a 40.570 toneladas.

En el Ministerio de Pesca se felicitan por que «España consigue un incremento del 10 % en la cuota» de ese túnido cuyos recursos se han recuperado y se encuentran en buena situación. Pendientes de ajustes, España podría capturar 6.874 toneladas, 619 más que ahora.