«Hemos ayudado a que un sitio tan conservador como Donosti sea más descarado», añade.
El siguiente paso será asumir un nuevo concepto gastronómico en el Kursaal, donde está el restaurante Nineu, que quiere poner en marcha antes del verano. «El hilo conductor será el fuego, que no la brasa, porque Guipúzcoa está llena de asadores, algunos de los mejores del mundo, como Elkano o Etxebarri. Pero, ¿y el rescoldo? ¿Y los guisos al rescoldo?», especifica.
Tanto este nuevo proyecto como la nueva temporada de Mugaritz le tienen «muy motivado». «El día que me levante desmotivado, adiós», asevera.