Deportivo camuflado como familiar

MOTOR ON

Bajo la apacible apariencia de una berlina familiar se esconde un devorador de asfalto con 450 caballos en su corazón y tracción Quattro. Llegará a principios del próximo año al mercado y su precio será de 96.890 euros.

08 oct 2017 . Actualizado a las 09:03 h.

Tiene mucho morbo comprarse un Audi A4 Avant, que es una pacífica berlina de lujo con carrocería familiar con portón posterior, y elegirlo en versión RS con un motor de gasolina V6 de 2.9 litros dotado de turbo y con 450 caballos de potencia.

El morbo es jugar al despiste con los que tenemos alrededor, que en ningún momento adivinarán el potencial deportivo de nuestro coche bajo su apacible aspecto.

Y es que acelerar de 0 a 100 km/h en solo 4,1 segundos está al alcance de muy pocos deportivos. Audi ha presentado en el Salón de Frankfurt este curioso modelo, que aúna como pocos las características de un deportivo radical y un familiar, donde puedes llevar las sillitas del niño en el maletero o meter en él una bicicleta o una tabla de surf.

Si ustedes se preguntan si este bipolar modelo tiene mucho predicamento en el mercado, les diremos que sí. Dejando al margen su alto precio, en países como Alemania se vende bien y ahora la marca de los cuatro aros pone su punto de mira en el mercado chino, donde muchos millonarios aún prefieren pasar discretamente de puntillas ante la sociedad de su país y para ello este coche es único.

Solo los que se fijen mucho en los detalles podrán adivinar enseguida que no es un simple A4 Avant. Este RS monta llantas de aluminio de 19 pulgadas y opcionalmente hasta de 20. Su frontal dispone de una parrilla de panal de abeja, lleva faros Matrix LED, los más sofisticados del grupo, los pasos de rueda son 3 centímetros más anchos que en un A4 normal y por detrás deja ver dos tremendas salidas de escape rodeadas por un difusor casi de carreras y coronadas por arriba por un llamativo spoiler. La guinda la pone su color azul específico. En su interior nos acogen unos asientos tipo baquet y entre sus indicadores aparece uno que mide las fuerzas G por si nos mareamos al acelerar o en las curvas. Todo en el Audi RS4 Avant juega al despiste.