Los ERE caen a la mitad

Gabriel Lemos REDACCIÓN / LA VOZ

ECONOMÍA

En Galicia se regularon 12.152 empleos el año pasado, la cifra más baja desde el 2008

29 ene 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

Las empresas gallegas aplicaron el año pasado 984 expedientes de regulación de empleo (ERE). La cifra, que arroja una media de 82 procesos mensuales, es todavía muy elevada si se compara con los registros previos a la crisis, pero la más baja desde el 2008. Y es un 49 % inferior a la del ejercicio precedente, cuando se ejecutaron 1.917 regulaciones de empleo en la comunidad.

Una reducción que es todavía mayor en el caso de los despidos colectivos, el único de los tres tipos de ERE que existen en la actualidad que conlleva la extinción definitiva del contrato. La mejora de la coyuntura económica, aderezada con una dosis de incertidumbre introducida por la última reforma laboral, que eliminó la autorización administrativa que hasta entonces era preceptiva en caso de desacuerdo entre empresa y trabajadores, redujo a mínimos esta figura. El año pasado solo se aplicaron 39, frente a los 112 del 2013 (un 65 % menos).

Y es que las empresas gallegas que se vieron abocadas a realizar ajustes de plantilla el año pasado optaron de forma mayoritaria por reducir la jornada laboral de sus trabajadores -y con ella sus salarios-, que fue la fórmula elegida en 484 expedientes. En el resto, otros 461, se optó por la suspensión temporal de contratos.

Esta última medida, muy extendida en la industria para ajustar la plantilla a sus necesidades de producción, es la que más empleos reguló durante el año pasado. En concreto, fueron 8.924 los trabajadores afectados por un ERE suspensivo (un 28,5 % menos que en el ejercicio precedente), a los que se suman los 2.484 que vieron reducidas sus jornadas (-54,3 %) y los 744 despedidos (-61 %).

En total, las empresas gallegas regularon 12.152 empleos el año pasado, poco más de mil al mes, frente a los más de 28.800 trabajadores afectados en el 2012, el pico de los ERE en Galicia. En solo dos años, el número de afectados ha caído cerca de un 58 % y se acerca ya a los valores previos a la crisis -10.144 en el 2008-.

 

 

Solo la pesca empeora la cifras

 

Por sectores, solo el primario reguló más empleos el año pasado. Fueron 50 los trabajadores afectados en el campo y 988 en el mar, con incrementos del 8,7 y del 54,9 %, respectivamente, según la estadística actualizada ayer por la Consellería de Traballo. Malos registros, los del sector pesquero, que se explican por los paros biológicos impuestos en ciertos segmentos de la flota, que obligan a las armadoras a aplicar expedientes de regulación de empleo para acceder a las ayudas públicas que compensan el amarre.

En cualquier caso, los datos confirman que el sector primario es el único en el que todavía no se ha estabilizado el mercado laboral. De hecho, según la última encuesta de población activa, fue el único que destruyó empleo en el 2014, con 9.900 ocupados menos.

El repunte de la actividad en la industria, los servicios e incluso en la construcción tiene un reflejo evidente en la estadística de los ERE. El sector terciario, aupado por los buenos registros turísticos, reguló el año pasado la mitad de empleos que en los doce meses anteriores (3.576 frente a los 6.939 del 2013). Por contra, y pese al descenso experimentado en el último ejercicio, las empresas industriales siguen siendo las que más recurren al ERE como mecanismo para ajustar sus plantillas a los ciclos productivos. De los 6.395 trabajadores afectados en el sector (más de la mitad del total en la comunidad), ocho de cada diez fueron incluidos en un expediente de suspensión temporal, mientras que solo menos del 5 % fueron despedidos. Circunstancia que explica también que los ERE caigan con mucha más fuerza en Lugo y Ourense que en el eje atlántico.

La presión afloja también sobre el ladrillo, con 1.143 afectados por algún expediente de regulación, casi un 47 % menos que en el 2013.