La Xunta dio 2,7 millones el pasado año para limpiar montes en la provincia

Xosé María Palacios Muruais
XOSÉ MARÍA PALACIOS LUGO / LA VOZ

A MARIÑA

SUSO PENA

En la comarca de A Mariña hubo once beneficiarios, que se llevaron 138.000 euros

25 jun 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

Un total de 2,7 millones de euros (exactamente, 2.793943,20) fue la cantidad destinada por la Xunta durante el año pasado para trabajos de limpieza de montes en la provincia de Lugo. Son ayudas que se conceden dentro de una línea anual de convocatorias y en la que los fondos se asignan en régimen de concurrencia competitiva.

Tratamientos silvícolas, prevenir daños causados por incendios o por otras causas y elevar la capacidad y el valor ambiental de los montes son los fines que se persiguen. De todos modos, la mayor parte de las ayudas se dan para montes en los que el aprovechamiento forestal es la mayor finalidad del terreno, según explicaron fuentes de la Xunta en Lugo. Particulares, comunidades de montes y sociedades forestales pueden beneficiarse de esas ayudas.

Los fondos se reparten por toda la provincia, aunque en diferentes cantidades totales y porcentajes, hasta sumar 190 destinatarios. La zona de Os Ancares-A Fonsagrada tuvo un total de 42 beneficiarios, con 376.4022,59 euros en la comarca ancaresa y 358.442,72 en la fonsagradina. En A Mariña hubo 11 beneficiarios, que se llevaron 138.000 euros.

Los beneficiarios de Terra Chá fueron 34, y los fondos que recibieron sumaron 410.320,41 euros. En la zona centro de la provincia (Lugo, A Ulloa, Sarria y Meira) se concedieron ayudas a 59 beneficiarios (210.835,73 euros en la comarca lucense; 101.129,51 en la ulloana; 263.462,65 en la sarriana, y 7.340,40 en la meirense); y en la zona sur, por último, se entregaron 44 ayudas (460.930,78 en la comarca de Lemos; 349.420,92 en la de Quiroga, y 117.656,49 en la de Chantada).

Aunque los tratamientos y la limpieza en general suponen gran parte del destino de las ayudas, una comunidad de montes o una sociedad forestal pueden también utilizar los fondos recibidos para la construcción de depósitos de agua. Mientras no estén terminados los trabajos y no se haya realizado una inspección, no se cobran las ayudas.

Comuneros de Guitiriz pretenden recuperar una zona dañada por el «Klaus»

La comunidad de montes de Lagostelle (Guitiriz) pretende recuperar una zona de pino silvestre que lleva años dañada. El terreno quedó destrozado por el paso del ciclón «Klaus», que afectó a Galicia a finales de enero del 2009. En una superficie de unas 16 hectáreas -son cálculos del presidente de la comunidad, Francisco Roca- se prevé recuperar la actividad forestal.

Es uno de los pasos que tiene en marcha la comunidad, importante en el municipio guitiricense por la amplia extensión que abarca (unas 800 hectáreas). Al mismo tiempo, afirma Roca, se están realizando trabajos de limpieza en márgenes de pistas: son unos 40 los kilómetros incluidos en esas operaciones.

La junta directiva, que lleva pocos meses en el cargo, tiene intención de poner en marcha más iniciativas, aunque por encima de unos trabajos o de otros hay un principio inamovible: el monte bien cuidado es una eficaz prevención contra el fuego. «Investir no monte é una riqueza», sostiene Roca, convencido de que el monte cuenta con unas potencialidades necesitadas de desarrollo.

Hay también comunidades de montes en las que se realizan trabajos de limpieza aunque la forestal no sea la principal de sus actividades. En esa situación está una como la de Codesido (Vilalba), en donde más importante que la superficie de plantaciones forestales es la de pastos, que se alquilan, por la presencia de la ganadería en la zona.

El pino es la especie que más abunda en el terreno de esta comunidad. El presidente, Manuel Rodríguez, considera que la limpieza es útil, «polo que poida pasar».