La flota gallega podrá pescar bacalao en una zona de los grandes bancos de Terranova que llevaba 32 años cerrada

Con sus claroscuros, la flota gallega no ha salido mal parada de la cumbre de la NAFO (Organización de Pesquerías del Atlántico Norte) que ayer se cerró en Halifax (Canadá), al entender de la Organización de Productores de Buques Congeladores de Merlúcidos y Cefalópodos de Vigo (OPPC-3). Es cierto que se ha recortado un 2,3 % el total admisible de capturas (TAC) de fletán negro a consecuencia de haber aplicado nuevas reglas de gestión y en contra de lo que perciben los pescadores en el caladero, pero las 14.761 toneladas fijadas «implican una continuidad y estabilidad de la actividad en el 2025», explica el gerente de la OPPC-3, Edelmiro Ulloa, que ha seguido las reuniones durante toda la semana.

También ahorrarán sobresaltos los TAC de gallineta (17.503 toneladas para el 2025 y 15.636 para el 2026), y de bacalao (12.613 toneladas) fijados en la zona 3M; el de la gallineta 3O (20.000 toneladas) y, sobre todo, haber esquivado evitar el cierre de la pesquería de esta especie en la 3LN, pues interacciona con otras pesquerías y el TAC cero sería un problema. Se permitirá pescar 6.000 toneladas. Tendrán también mil toneladas de bertorella en la 3NO y 7.000 de raya en la 3LNO.

Y ganan bacalao. Ya no es solo que aumenten las posibilidades de pesca en la meseta del Flemish Cap (zona 3M), donde se ha fijado ese TAC de 12.613 toneladas, es que después de 32 años de moratoria, la flota gallega podrá pescar bacalao en la zona norte de los grandes bancos de Terranova. Se ha abierto con 947 toneladas para todas las partes de la NAFO. De ellas, 735 le corresponden a la UE; unas 160 toneladas para la flota española.

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