Cuenta atrás para la repatriación de tres supervivientes y nueve fallecidos
SOMOS MAR
El avión militar enviado por España para recogerlos podría volver mañana
20 feb 2022 . Actualizado a las 07:49 h.Cuenta atrás para el retorno a Galicia de los tres supervivientes del naufragio del Villa de Pitanxo y de los nueve fallecidos recuperados de las gélidas aguas de Terranova, en estos casos, a donde decidan sus familias. Sin rastro de los doce tripulantes desaparecidos, familiares y amigos se concentran este mediodía en Marín clamando por la reanudación de la búsqueda.
Un avión del Ejército del Aire fletado por el Gobierno de España llega este domingo al aeropuerto de San Juan para repatriarlos. Podría regresar el lunes, hacia España, pero al cierre de esta edición ninguna de las fuentes consultadas pudo precisar cuándo llegaría.
A horas del reencuentro de los que sobrevivieron con sus familias y del alivio de quienes quieren a los fallecidos porque cuando menos podrán darles el último adiós, se abre un punto y seguido en una tragedia que ha conmocionado al mundo porque han perdido las vidas 21 de los 24 trabajadores del mar que pescaban fletán en un arrastrero congelador de Pesquerías Nores, de Marín.
A bordo de otro pesquero gallego, el Playa Menduíña Dos, atracaron a las once y media de la mañana del sábado, hora española, en un muelle de San Juan de Terranova los tres que salvaron las vidas: el capitán Juan Padín, su sobrino Eduardo Rial y el ghanés Samuel Koufie. El barco que los rescató portaba en sus cámaras frigoríficas los cuerpos de otros seis compañeros que había recuperado, más el que había recogido, también el mismo día del hundimiento, el arrastrero portugués Franca Morte. Al mal tiempo, que impedía subir a bordo al práctico, se atribuyó que el Playa Menduíña Dos entrase en puerto después de esperar varias horas capeando por las inmediaciones. El viernes por la mañana le precedió el buque canadiense Nexus, con otros dos fallecidos a bordo.
Identificados y desaparecidos
El cónsul general de España en Montreal y el honorario recibieron en San Juan al Menduíña y pudieron hablar con los supervivientes. Uno a uno, los siete cadáveres fueron desembarcados y trasladados en coches fúnebres a la morgue de la capital de Terranova, donde forenses canadienses certificaron su estado.
Con la cooperación de los supervivientes, de un equipo del consulado, de las autoridades canadienses y de la armadora del Villa de Pitanxo, se identificaron los nueve cuerpos recuperados. Eran los de Juan Antonio Cordero (primer oficial, o patrón de pesca), Fernando Santomé (cocinero), Ricardo Alfonso Cruz (engrasador), Rogelio Franco (ayudante de cocina, o marmitón), Daniel Fernando More, su primo Diego Andrés More, Miguel Lumbres, Rogelio Franco, William Arévalo y Apaanah Apaanah Zure (todos ellos marineros).
A medida que se confirmaban las identidades, personal de la Embajada de España en Canadá y psicólogos se lo comunicaban a las familias de esos cinco españoles, algunos nacionalizados, tres peruanos y un ghanés. Siguen desaparecidos Raúl González, Martín Quino, Edemon Okutu, Ricardo Arias, Fernando González, Michael, Francisco de Pazo, Francisco Navarro, Edwin Córdoba, Jonathan Calderón, Pedro Herrera y Juan Frías.
Los tres supervivientes permanecieron hasta poco antes de la cuatro de la tarde a bordo del barco que el martes los rescató de la balsa salvavidas en la que se salvaron cuando se iba a pique el Villa de Pitanxo. A esa hora, ifnorma Europa Press citando testigos, los recogió un vehículo y salieron del puerto. Presumiblemente con destino al lugar donde se alojen hasta que sean repatriados en el avión militar español que los trasladará a España.
Desde el Gobierno español confirman que el A-400 del Ejército del Aire aterriza este domingo en San Juan y «estará listo para el regreso desde el mismo lunes». Se presume que aterrizará en Madrid. Autoridades españolas preparan el protocolo para que puedan recibirlo las familias.
Los que lograron salvarse están «muy afectados anímicamente»
Cuatro días después de ver cómo el barco donde faenaban acababa engullido por el mar en poco más de diez minutos, los tres supervivientes de la mayor tragedia de la pesca gallega en las últimas décadas pisaron tierra el sábado en Terranova. Antes de salir del pesquero que los rescató, recibieron a bordo al cónsul de España en Montreal, así como a otros miembros del equipo enviado por el Ministerio de Exteriores para apoyarlos.
«Se encuentran bien, pero, lógicamente, muy afectados anímicamente», explican fuentes oficiales citando las impresiones transmitidas por la delegación consular con la que hablaron.
Es lo que ha trascendido sobre tres trabajadores del mar, el patrón del Villa de Pitanxo y dos tripulantes, que jamás olvidarán un 15 de febrero en el que se salvaron porque el Playa Menduíña Dos los recogió a tiempo de la balsa a la que saltaron. Solo ellos saben cómo se sienten tras haber perdido a los 21 compañeros con los que habían zarpado de Vigo el 26 de enero. Digerir esa tragedia probablemente requerirá tiempo y apoyo, especialmente el de las familias, que esperan impacientes su regreso.
