Planas plantea a la Guardia Civil nuevas líneas de trabajo ahora que Pesca va a tener cuatro patrulleras más
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El ministro de Agricultura y Pesca repasó con la responsable del instituto armado las líneas de colaboración que mantienen
26 oct 2021 . Actualizado a las 05:00 h.Una parte más que importante de los fondos que el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia reserva para atender al sector marítimo-pesquero se dedicará a reforzar la inspección y control. Entre otras cosas, ese programa plantea la inversión de 44 millones de euros entre los años 2021 y 2023 para la construcción de cuatro nuevas patrulleras adscritas a la Secretaría General de Pesca y la modernización de otras tres que ya están actualmente en activo.
Y aunque esas embarcaciones de vigilancia son propiedad del departamento que dirige Alicia Villauriz, es la Guardia Civil, en virtud del acuerdo marco de colaboración sobre vigilancia e inspección, «con un canal de comunicación permanente para un control más eficiente», señala Agricultura en un comunicado.
Ese pacto objeto de debate en el encuentro que han mantenido el ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas, y la directora general de la Guardia Civil, María Gámez, en la que han repasado los distintos ámbitos de estrecha colaboración entre el ministerio y el instituto armado y plantear la posibilidad de nuevas líneas de trabajo común.
Según apuntan desde Agricultura, la labor de la Guardia Civil es imprescindible para las tareas de inspección y control que competen al ministerio en asuntos como la sanidad animal y vegetal, la actividad cinegética, la calidad y seguridad alimentaria y la actividad pesquera.
En cuestiones sanitarias, la principal vía de colaboración está relacionada con la aplicación de los programas de control y de comercialización derivados de la Norma Internacional de Medidas Fitosanitarias y de los viajes con animales de compañía.
El Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil y el ministerio trabajan en líneas de investigación sobre el tráfico ilegal de animales de compañía, declaraciones fraudulentas y la detección y control de vegetales en los equipajes. Actualmente está en trámite un protocolo de actuación para la localización de cadáveres de jabalíes silvestres en zonas afectadas por la peste porcina africana.