La dirección les hizo una propuesta que incluye a los extrabajadores
07 may 2014 . Actualizado a las 07:00 h.El Gran Hotel tiene problemas para poder pagar a sus trabajadores porque todos los ingresos que recibe van directamente a pagar la deuda que mantiene con los antiguos trabajadores y a hacer frente a otros embargos. Esta situación le fue comunicada a los representantes del personal en una reunión, en la que el letrado de la empresa les efectuó una propuesta que está en estudio. Fuentes consultadas señalaron que se trata de solicitar a los tres juzgados lucenses que dictaron sentencias en ejecución, favorables a los trabajadores que pidieron la extinción de sus contratos, que permitan que los ingresos del establecimiento hostelero puedan repartirse entre los exempleados y los que todavía permanecen en la empresa. Para ello necesitan también, según fuentes consultadas, contar con el beneplácito de los propios afectados, que verán retrasados sus pagos.
Los juzgados están ingresando a los extrabajadores dinero a medida que lo van recibiendo de las cuentas que están embargadas. Parece ser que también hay embargos de la Seguridad Social y de Hacienda.
La propuesta la están valorando. El personal, que lo último que cobró fue febrero, está a la espera de que le ingresen la nómina del pasado mes de marzo, además de las que tienen pendientes de atrás. Tienen el compromiso de la empresa de que les pagará en los próximos días.
Ingresos de alquileres
La ocupación del hotel es desde antes de la Semana Santa elevada y las instalaciones están generando ingresos. También los reciben del alquiler de los salones de bodas y de la cafetería, que gestiona desde hace meses la empresa Terras do Miño. Se incorporará ahora también el restaurante La Oca, que reabrirá en este mes de la mano de dos antiguos empleados, que se hicieron con el mobiliario en el concurso de acreedores. Recuperará la actividad con el mismo nombre y con parte de la plantilla que había antes y una carta muy similar.
El hotel estaba pendiente de alquilar las instalaciones del spa, que fueron las últimas que se incorporaron al negocio. Por el momento, parece que no hay un acuerdo en ciernes.
Sobrecarga de trabajo
Los trabajadores del Gran Hotel que permanecen en el establecimiento, que son aproximadamente la mitad de los que había antes de que empezaran los problemas con los pagos, están realizando prácticamente las mismas tareas que cuando estaban todos. Fuentes consultadas señalaron que las jornadas laborales son agotadoras por la acumulación de carga de trabajo, que no se ve compensadas con el cobro puntual de los salarios, lo que está convirtiendo en insostenible la situación.
Parece ser que algún trabajador más está valorando la posibilidad de solicitar en el juzgado social la extinción de sus contratos.