El documental sobre O Courel que prepara este realizador monfortino entra por fin en su fase final, después de dos años y medio de trabajo
08 oct 2014 . Actualizado a las 05:00 h.«Terminarlo ya va a ser un triunfo», confiesa Manuel Valcárcel cuando se le pregunta por las perspectivas con las que afronta la ya cercana presentación al público del documental Tempo. Hace ya dos años y medio que este realizador monfortino se enfrentó al reto de describir en imágenes la vida en O Courel. Con un argumento construido alrededor del primer año de vida de la primera niña nacida en la aldea de Froxán en veintiocho años, Valcárcel se enfrenta al reto de contar su historia sin que el trabajo se le escape hacia el tópico y las imágenes de postal.
-¿Cuánto falta para ver el resultado final de «Tempo»?
-Están por terminar el montaje y la posproducción. Calculo que todavía me llevará dos meses terminarlo.
-El trabajo se le hizo más largo de lo que esperaba.
-Pensaba haberlo acabado antes del verano, pero al final se hizo todo más lento porque tuve que atender a otros trabajos.
-¿El resultado final será el que usted esperaba cuando empezó con este proyecto?
-Sí. Tú tienes un guion y vas grabando lo que quieres mostrar y dejando de lado otras cosas. Pero es cierto que aun teniendo eso claro, en el montaje acabas dejando fuera cosas que en un principio pensabas que iban a funcionar. Es una lucha constante para no caer en tópicos, en un montaje más típico, más parecido a lo que son los reportajes puros y duros de televisión. Yo quiero dar una visión muy particular, que la gente observe y saque sus conclusiones.
-Porque hablando de O Courel siempre hay peligro de caer en tópicos.
-Claro. Hoy en día en O Courel, en la Ribeira Sacra... todo está fotografiado y todo está hecho. Antes un profesional se diferenciaba de un aficionado en las técnicas que utilizaba, pero hoy la tecnología pone eso al alcance de cualquiera. Lo que antes era difícil que se viese y se escuchase hoy está superado. Así que tienes que ofrecer un lenguaje diferente, más basado en sensaciones y en el mensaje. En este documental me esfuerzo no para que se vea que llueve o hace frío, sino para que se noten esas sensaciones y así se entienda lo que los personajes van sintiendo.
-¿Le parece que lo está consiguiendo?
-Yo creo que sí, pero eso lo veremos en los preestrenos que quiero hacer en O Courel y en Monforte. A ver cómo reacciona la gente, porque puede pasar que lo que yo pienso que se entiende no se entienda tanto. Hay que tener en cuenta que esto no lleva narración, que es todo sonido ambiente, música y diálogos entre la gente. Los sonidos tienen que ser realistas, las imágenes crudas tienen que sentirse crudas y la soledad tiene que ser soledad. Tiene que transmitir el paso del tiempo desde otro punto de vista, el de O Courel. Porque allí el tiempo es otro, distinto incluso de un sitio también pequeño como Monforte.
-¿Le fue complicado convenceder a los vecinos que salen en el documental para que participasen?
-No, para nada. Por ejemplo, al personaje del anciano que vive solo, el cesteiro Pepe de Visuña, lo conocí porque me quedé tirado esa aldea durante una nevada. Me gustaba aquella localización y fui a encontrar a ese hombre precisamente en aquel el lugar que yo quería utilizar. Si lo haces así acabas entablando con la gente una relación, una amistad... Porque se dan cuenta de que no estás allí solo de paso. Y yo en este caso tenía todo el tiempo del mundo, sin la prisa de terminar antes de que terminase el domingo porque el lunes debía estar trabajando.
manuel valcárcel director de «tempo»»