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la voz VIGO

GRADA DE RÍO

M. V. F.

El Celta arrancará con una plantilla con mucho por cambiar, con las incógnitas de una pretemporada diferente y con la campaña de abonados pendiente

10 ago 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

El Celta comenzará el miércoles su pretemporada con casi todas las piezas del puzle societario por encajar. La más importante, confeccionar una plantilla que se instale en la tranquilidad y la estabilidad desde el primer día y el dibujo actual del elenco dista mucho del que debe ser el definitivo a 5 de octubre cuando se cierre el plazo de fichajes. Del mismo modo debe abordar una pretemporada, en teoría, más corta de lo habitual y con los partidos amistosos pendientes de los rebrotes. En el plano institucional, a 10 de agosto todavía no se ha lanzado la campaña de abonados, quizás porque no está nada clara la presencia de aficionados en los estadios hasta el 2021. También tienen pendiente el dibujo definitivo del fútbol base en el año de la Youth League. Por el momento ni se ha anunciado un fichaje para el Celta B, otro equipo cuyo futuro competitivo está en el limbo tras la últimos acontecimientos.

LA PLANTILLA

Un elenco que debe distar mucho del definitivo

Los célticos comenzarán la pretemporada el miércoles con un elenco de 30 jugadores que debe distar mucho del que comience la liga el 12 de septiembre, si finalmente es la fecha señalada, o el que presente el Celta a cierre de mercado (previsto para el 5 de octubre próximo). De las tres decenas de jugadores con las que comienzan Óscar García, nueve son de las categorías inferiores (y parece difícil que alguno de ellos pueda quedarse) y cuatro más pueden cambiar de aires durante el verano: Juan Hernández, Pione Sisto, Juncà y Jorge Sáenz, lo que dejaría el cuadro actual en 17 futbolistas.

Los dos cedidos y al menos cuatro fichajes

El Celta tiene casi dos meses de plazo para cerrar una plantilla en donde le ha reservado hueco a Rafinha Alcántara y Jesion Murillo, los dos jugadores que estuvieron cedidos el curso pasado, y también para incorporar al menos a cuatro jugadores que fortalezcan un proyecto que se ha tambaleado en las dos últimas temporadas: un delantero centro que acompañe a Iago Aspas parece lo más prioritario, pero el club también busca solidificar su columna vertebral con un mediocentro y un central y necesita a otro jugador de banda además de Vadillo. Y sin descartar la opción de un lateral zurdo e incluso un portero.

Solucionar las salidas de los cedidos y de jugadores con lo que no cuentan

La operación salida, en un contexto muy delicado, también está pendiente. El que parece más cerca de buscar nuevo destino de un modo temporal es el Toro Fernández, pero además el Celta debe buscar acomodo a Emre Mor y Jozabed, con los que no cuenta, y a otros jugadores que la pasada temporada formaron parte de la plantilla y que a priori no cuentan. Vender o facilitar la salida a los Pione Sisto, Juncà o Juan Hernández no parece nada fácil en el contexto actual. Diferente es la situación de Jorge Sáenz, a quien el Valencia tenía previsto repescar.

LA PRETEMPORADA

Un ciclo de cuatro semanas con los amistosos pendientes de la situación sanitaria

Salvo que el inicio de liga se dilate, la plantilla céltica tiene por delante un ciclo de preparación de cuatro semanas y media, un poco inferior a las seis habituales en un año estándar, pero hay que tener en cuenta que en esta ocasión las vacaciones fueron de tres semanas y por lo tanto el período de puesta a punto debe ser menor. Todo indica también que el equipo no saldrá de Vigo (A Toxa y Portonovo fueron su cuartel general en los dos veranos anteriores) y que toda la preparación se llevará a cabo en A Madroa. En cuanto a los amistosos, dependerá de la evolución de los rebrotes del covid-19. Por el momento el Sporting anunció uno con los celestes para el 5 de septiembre.

¿Habrá partido de presentación en Balaídos pese a la ausencia de público?

Enterrado hace años el Ciudad de Vigo, el Memorial Quinocho se convirtió en la puesta de largo del equipo en Vigo cada verano. Sin posibilidad de que haya público en las gradas, no se puede descartar su suspensión, aunque de una manera u otra el equipo necesita partidos amistosos para engrasar su nuevo proyecto y seguramente Óscar García quiera uno antes de empezar la competición oficial para reencontrarse con el campo vigués y recuperar sensaciones. El club mantiene el calendario estival en secreto.

CAMPAÑA DE ABONADOS

Sin fechas para el anuncio y con el enigma de si las gradas de abrirán

Nunca a 10 de agosto el Celta tenía pendiente de presentar su campaña de abonados, pero la situación provocada por la pandemia es tan diferente a cualquier otro planteamiento que a día de hoy no hoy no se conoce ningún detalle: ni cuándo se pondrán los abonos a la venta, ni a qué precio y mucho menos si los aficionados podrán entrar a las gradas a lo largo del curso. De entrada, todo indica que en el arranque los partidos continuarán siendo a puerta cerrada. Al menos hasta final de año y en función de la evolución de la pandemia. La temporada 18/19 el club recaudó 4,2 millones de euros por este apartado.

FÚTBOL BASE

Pendientes del arranque de las categorías inferiores en el año de la Youth League

El año más ilusionante para la base del Celta con la presencia del juvenil A en la Youth League está amenazado por las restricciones del covid-19. A estas alturas el Celta no hizo oficial la composición del organigrama de toda la base, no anunció un solo fichaje del Celta B, que sigue dirigido por Onésimo Sánchez porque tenía contrato hasta junio del 2021, y está pendiente de los protocolos para el funcionamiento de sus equipos de categoría nacional sobre los que la Xunta no tiene competencias. También es toda una incógnita cómo se va desarrollar la Champions juvenil al tratarse de una competición internacional. Por el momento aún está pendiente acabar la temporada 19/20 cuya fase final se disputa en Nyon por régimen de concentración desde el 16 de agosto próximo.