Test como antesala al nuevo curso

m. v. f. VIGO / LA VOZ

GRADA DE RÍO

XOAN CARLOS GIL

30 jugadores entre los que no está el Toro inician el miércoles la pretemporada

09 ago 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

El Celta 2020/2021 echará a andar el miércoles a las 18.00 horas en A Madroa con 30 futbolistas -21 del primer equipo y nueve del filial-, pero ayer en A Sede se vivió un pequeño adelanto del fin de las vacaciones. Todos los convocados acudieron a las dependencias del club en Príncipe para someterse a los controles PCR en una mañana de reencuentros con mascarilla y saludos con los codos y los puños para cumplir con las medidas de seguridad.

Pero hubo una ausencia destacada. Gabriel Fernández no se presentó con permiso del club al estar cerca de cerrar su salida como cedido. De hecho, horas antes colgó en Instagram imágenes grabadas por él de su hija, que reside en Uruguay. Tampoco se presentaron, aunque en sus casos ya era predecible, Emre Mor y Jozabed, que estuvieron a préstamo la pasada campaña y que no entran en los planes de Óscar García Junyent.

Por el contrario, sí acudió a hacerse el test un Pione Sisto que pese a que también parece próximo a salir del club, figura en la lista de 30 de Óscar. Como un Jorge Sáenz al que el Valencia tiene intención de repescar, pero que por ahora tiene visos de continuar en Vigo. Las caras nuevas del primer equipo fueron Álvaro Vadillo y Renato Tapia, que fue recibido por Miñambres a su llegada a A Sede.

Los más madrugadores fueron los miembros del cuerpo técnico, ya con el nuevo preparador físico, Quique Sanz, y demás empleados del club, algunos de los cuales ya se habían sometido a los test antes de las 9.00 horas. Pronto se dejaron ver también Antonio Chaves, Felipe Miñambres, Carlos Mouriño y el técnico del filial, Onésimo Sánchez, que mantuvo una charla con el director deportivo. Lo miso haría el presidente más avanzada la mañana y por espacio de más de media hora en la terraza de A Sede.

Al filo de las 10.00 horas aparecía el primer jugador del primer equipo, un Nolito que tardó cuestión de segundos en desatar las carcajadas de los presentes cuando le espetó divertido a Miñambres: «¡Agüita, qué pocas vacaciones nos habéis dado!». El capitán, Hugo Mallo, muy serio, era el siguiente en llegar, sucedido por un Denis más sonriente y que coincidió en la puerta con el director general.

Tras Iván Villar y Kevin hacía su aparición uno de los jugadores que eran duda para ayer. Porque aunque el Valencia quiere repescar a Jorge Sáenz -en principio cedido en Vigo por dos años-, el jugador sigue a día de hoy en la disciplina del equipo celeste y está previsto que se ponga a las órdenes de Óscar el miércoles. Lo mismo sucede con Pione Sisto, que llegó con sudadera de manga larga y la capucha puesta, pero no logró pasar desapercibido y saludó cordial. Después abandonaría A Sede con Aidoo.

Rubén, por su parte, llegó con una muleta al estar aún recuperándose de la operación de rodilla, y a Néstor Araujo se le pudo ver con una mascarilla con los colores del Celta y ajeno a los rumores que le sitúan fuera del equipo la próxima temporada. Y así fueron pasando los demás del primer equipo, quedando para el final los futbolistas del filial.

Entre los jugadores del B que trabajarán con el primer equipo estará uno que aún no ha debutado con el filial (aunque sí fue convocado), la perla precoz Miguel Rodríguez Vidal, que en el verano del 2019 acabó entrenando a las órdenes de Escribá con 16 años. A su llegada estuvo un rato charlando con Mouriño al advertirle que había demasiados jugadores en ese momento en la clínica y debía esperar.

Antes de entrar, para luego hacerlo juntos, coincidieron los porteros Iago Domínguez y Ruly García (que tampoco ha estado aún en la disciplina del B), así como Gabri Veiga e Iker Losada y Fontán y Lauti. Los tres últimos, como Pampín, repiten con respecto al año pasado. Completa la lista Solís.