Los autobuses podrán reducir servicios desde las 18 horas y los fines de semana

GALICIA

Un autobús en el polígono de Novo Milladoiro, Ames
Un autobús en el polígono de Novo Milladoiro, Ames PACO RODRÍGUEZ

Las empresas deberán mantener un mínimo del 50 % de las frecuencias. La Xunta vigilará que se cumplen estas condiciones y obligará a reponer servicios que se demuestren necesarios. La autorización es temporal, mientras duren las restricciones sanitarias

04 feb 2021 . Actualizado a las 20:21 h.

La Xunta ha tenido que ceder ante el clamor de las empresas de autobuses, cuya demanda ya era baja antes de las últimas restricciones sanitarias y que, en la actualidad, acumulan bajadas de usuarios de hasta un 80 % en algunos casos, especialmente los fines de semana. Así, la Consellería de Infraestruturas e Mobilidade, de la que dependen principalmente los recorridos metropolitanos e interurbanos, ha autorizado a las concesionarias que están bajo su paraguas reducir de forma drástica sus servicios a partir de la tarde de mañana, pero garantizando la continuidad de las conexiones que estén vinculadas a los centros laborales y sanitarios, así como aquellas que tienen que ver con el transporte escolar.

Los cambios que ha autorizado el departamento que dirige Ethel Vázquez podrán afectar a aquellas frecuencias que tenían la salida programada a partir de las 18.00 horas de lunes a viernes, siempre y cuando sean trayectos de más de 50 kilómetros. Pero también habrá cambios relevantes los fines de semana y festivos. En principio, entre las seis de la tarde y las doce de la noche, las compañías de transporte interurbano solo estarían obligadas a garantizar un mínimo del 50 % de los servicios, adaptando la oferta a la demanda actual. Esa oferta mínima de la mitad de las frecuencias debería estar garantizada también los sábados, domingos y festivos en todas las concesiones, con la obligación de mantener al menos una expedición de ida y vuelta por línea, según precisó la consellería en un comunicado.

Para Infraestruturas, la decisión responde a una «adecuación» de la oferta a las restricciones de movilidad decretadas hace una semana por el Ejecutivo autónomo, que impide las salidas del municipio de residencia a no ser por una causa justificada o razones laborales.

Supervisión y reposición

En cualquier caso, la Xunta recuerda que se trata de una adaptación temporal, que será reevaluada a medida que se vayan levantando las restricciones en las próximas semanas. Así, la consellería competente en el transporte público estará atenta al proceso de reducción de servicios que se producirá en los últimos días y asegura que continuará realizando un «seguimento exhaustivo do funcionamento do transporte público co obxectivo de garantir a mobilidade dos cidadáns». De hecho, las empresas concesionarias estarán obligadas a reponer cualquier servicio que se demuestre que es necesario.

Monbus, uno de los principales grupos de transporte de viajeros por carretera, ya avanzó en un comunicado que va a reformular sus servicios siguiendo las indicaciones de la orden firmada ayer por la Dirección Xeral de Mobilidade. Y avisan a sus clientes de que los cambios se reflejarán en su página web y en sus redes sociales.

La Consellería de Infraestruturas e Mobilidade atiende así las demandas del sector ante la brutal caída de la movilidad, recogidas por la conselleira Ethel Vázquez en una reunión que tuvo con las federaciones del transporte el lunes pasado. Tras el encuentro, pidió al Ministerio de Transportes que mantuviera este año el fondo de ayuda para compensar las pérdidas de estas empresas.

Los recortes de frecuencias, a los que la Xunta se resistió en los últimos meses, llegan cuando se cumple algo más de un mes de la puesta en marcha global del nuevo plan de transporte, que implicó la renovación de 3.100 líneas de autobús en toda la geografía gallega. Cada mes, las nuevas concesionarias prestan 300.000 servicios que fueron agrupados en 127 contratos. Estas adjudicaciones durarán 10 años.