Con esta OPE, la Xunta da un paso decisivo hacia la práctica estabilidad del empleo en Educación, porque según Feijoo supondría reducir la interinidad al 5 %.
El disgusto de los aspirantes por libre e interinos
El presidente de la Xunta también abordó en la rueda de prensa del Consello la situación que están denunciando aspirantes de las oposiciones por libre y los interinos, que están mostrando por diferentes vías su disgusto por un formato que ambas partes creen que benefician al otro, al convocarse por el sistema de concurso-oposición en el que cuentan los méritos acumulados por trabajadores sin plaza, así como los cursos realizados. «Comprendo que haxa opositores por libre que vexan máis facilidades para os interinos, pero é que eses traballadores xa son persoal indefinido da Xunta», explicó Feijoo, que justifica el modelo para que cada vez más trabajadores se puedan incorporar al funcionariado y evitar así que en la Administración haya dos categorías distintas. «É lóxico e humano», insistió tratando de ser comprensivo, pero «é o habitual» en el Gobierno central, en las comunidades autónomas «e son condicións pactadas expresamente cos sindicatos na mesa sectorial». El titular de la Xunta se extendió para explicar que las oposiciones restringidas del pasado «agora non se poden facer», y admitió que en el concurso de méritos esos interinos «son imbatibles». Ahora bien, en la oposición manda la nota de corte y no pueden acceder al puesto.