Feijoo ve injustificable que el AVE no esté ya en pruebas a finales del 2019

r. m. SANTIAGO / LA VOZ

GALICIA

Santi M. Amil

El Gobierno gallego asegura que el cumplimiento de los plazos solo depende de la voluntad política

30 jun 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

El AVE a Galicia no solo es «viable» en los plazos fijados con el anterior Gobierno central, sino que lo avalan los técnicos del Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (ADIF), entre ellos la que desde ayer es su presidenta, la gallega Isabel Pardo de Vera. Así lo sostiene Alberto Núñez Feijoo, quien no ve excusa para que el Ejecutivo de Pedro Sánchez no mantenga el compromiso de Rajoy sobre un «proxecto absolutamente prioritario» para Galicia. Ese compromiso implica que a finales del 2019 los trenes de la alta velocidad viajen en pruebas por Galicia, aunque para asegurarlo «cómpre», lejos de cuestiones técnicas, «vontade política para manter a dilixencia construtiva e a administrativa», además de «seguir executando obras cunha cadencia intensa».

La decisión del ministro de Fomento, José Luis Ábalos, de auditar los plazos de las líneas de alta velocidad comprometidos por el Gobierno de Rajoy abrió la puerta a la incertidumbre en San Caetano, que ha armado un informe con los datos facilitados por el ADIF, y contrastados por la propia Administración autonómica, para «confirmar» en el Consello de la Xunta de ayer que el nivel de ejecución de las obras del AVE entre Galicia y Madrid, con solo el 5 % pendiente de licitación, está por encima del 80 %, lo que hace viable y «realista» el «obxectivo da circulación en probas a finais do 2019». Así lo defendía tras la reunión de su Gobierno un Feijoo «máis tranquilo» con el nombramiento de Pardo de Vera después de cuestionar que la primera reflexión del Gobierno sobre el AVE gallego fuese «co seu partido e non co Goberno de Galicia», dijo en alusión a la reunión de Ábalos con Gonzalo Caballero, y además «para cuestionar os datos facilitados polo ADIF».

Buena conocedora del ADIF y de las obras del AVE gallego, que dirigió hasta ahora, el de Pardo de Vera «é un bo nomeamento para Galicia», concluyó el presidente, aunque será su encuentro con Pedro Sánchez en la Moncloa, el 17 de julio, el que dará la medida de «se estamos a falar en serio ou se imos outra vez a discutir o obvio». Y lo obvio para el presidente son los datos aportados por el ADIF. Ese informe, elaborado con amplio detalle, para que «non haxa nin trampa nin cartón e non empecemos agora a buscar escusas para non facer o que temos que facer», estará sobre la mesa.

Con el trecho de la línea entre Zamora y Madrid ya en servicio y la previsión de que en el último trimestre de este año concluya el de Zamora-Pedralba da Pradería (acortará otros 30 minutos de viaje), la mayor intensidad de las actuaciones pendientes se concentra actualmente entre esta localidad y Taboadela, con 5 tramos concluidos y 8 que superan el 90 %, «polo que estarían en disposición de rematar nos vindeiros meses». Y las obras de menor avance estarían para la primavera del 2019. Incluso el viaducto das Teixeiras, que hace un año era un punto crítico que podía comprometer el plazo de las obras, está ahora en ejecución y en disposición de finalizar en plazo, según la Xunta. También hay trabajos pendientes entre Taboadela y la estación de Ourense, pero ni la complejidad de la variante de Ourense alteraría ese plazo, según el Gobierno gallego, al decidir el ADIF adaptar el corredor actual mientras se avanza en los trámites de la variante.

La conselleira Ethel Vázquez celebra también el nombramiento de Pardo de Vera, una persona con «acreditada capacidade de traballo, empurre e tesón».

Un técnico declara que la supresión del ERTMS en Angrois no afectaba a la seguridad

Un técnico de la empresa Bombardier, que suministraba el software del ERTMS del Alvia que se accidentó en Angrois ha afirmado que la desconexión de este sistema a bordo del tren se adoptó pese a que las «anomalías» detectadas no afectaban a la seguridad. Ayer declararon en el juzgado, en calidad de testigos, dos técnicos. La primera comparecencia, la de un profesional que trabajó para la UTE (unión temporal de empresas) compuesta por Thales y Dimetronic, según apuntaron fuentes consultadas por Europa Press presentes en la sala, fue «poco relevante», puesto que no recordaba muchos de los datos.

En cambio, la intervención del técnico de Bombardier fue «más interesante», según las fuentes consultadas, ya que comentó que las «anomalías» que fueron detectadas, retrasos derivados de un tramo marcado a 100 kilómetros por hora por el que el sistema hacía ir a 75, no implicaban ninguna afección a la seguridad.

Es más, según las fuentes consultadas, de su exposición se deduce que la seguridad era «incluso excesiva» en la línea debido a estas interferencias, para las que, además, Bombardier propuso soluciones alternativas al tener constancia de la desconexión, un mes después.

Los expertos coinciden en que de haber estado instalado el ERTMS embarcado (pese a carecer de él la línea en los últimos kilómetros tras el cambio de proyecto original) el accidente se podría haber evitado.