Retienen a seis miembros de una familia de Arteixo en la trastienda de un estanco para llevarse unos 18.000 euros
06 nov 2014 . Actualizado a las 09:28 h.A Coruña y su área metropolitana van de atraco en atraco. El último episodio tuvo lugar el martes en el núcleo de Uxes, en Arteixo, a plena luz del día. Cuatro encapuchados entraron en el estanco de la localidad y se llevaron unos 18.000 euros tras amenazar a sus dueños con armas y retenerlos en la trastienda.
Ocurrió a las 14 horas, cuando uno de los dueños del negocio familiar se encontraba sentado junto al mostrador mientras el resto estaban en la trastienda. No se percató de que entraban tres hombres, con capuchas y con la cara tapada, y casi sin darse cuenta le pusieron una pistola en la sien al grito de: «Esto es un atraco». En ese momento, apareció el sobrino de la víctima, que estaba en la trastienda: «Pensé que era una broma. A esa hora no te imaginas que te van a atracar. En cuanto me acerqué a ellos, me sacaron un puñal, me empujaron y nos metieron para dentro. Encañonaron a mi tío y nos ataron las manos con bridas», relata Fernando Pombo, que asegura que no le dio tiempo a saber si la pistola era de verdad o simulada: «Te aseguro que el puñal era de los que clava», confiesa.
Hasta seis personas de la misma familia estuvieron retenidos y atados mientras tres atracadores se hacían con la recaudación. El cuarto asaltante estaba esperando fuera en el coche: «En el estanco estábamos cuatro y luego vino mi madre que estaba abajo y la metieron para dentro. Mi padre también apareció y lo tiraron al suelo», explica este vecino de Arteixo: «Es que es muy duro ver a toda la familia atada y tirada en el suelo. Te sientes impotente. Recuerdo que les pedí que dejaran a mi tío porque tiene problemas de salud. Les dije que no íbamos a poner resistencia y que se llevaran el dinero pero que no nos hicieran daño», relata. Todo fue muy rápido y Fernando Pombo va recordando detalles a medida que pasan las horas: «Hablaban en español pero no sé decir si tenían algún acento especial», indica este hombre, que asegura que es el tercer robo que sufre el estanco.