Una planta reflotada en tiempo récord

Cristina Barral Diéguez
cristina barral PONTEVEDRA / LA VOZ

FIRMAS

Acolact prevé incrementar en el 2014 la producción de yogures y postres

17 nov 2013 . Actualizado a las 07:00 h.

La planta de Clesa en Caldas volvía a manos gallegas el 19 de julio del 2012. Ese día se firmaba en una notaría de Madrid la escritura de compraventa. Acolact, la agrupación de cooperativas que integran Agris, Central de Frades, Cogasar, Cooperativa Agraria Provincial, Cusoviame, Feiraco, Lemos, Melisanto, Os Irmandiños y Xuncoga, se hacía con el control de la factoría ubicada en Saiar. El coste de la operación ascendió a 10,2 millones de euros (terrenos, instalaciones y marca) y contó con el apoyo del Igape y de Xesgalicia.

Feiraco, que se puso al frente de la gestión de la fábrica, se encontró con unas instalaciones «semiparadas» y con un nivel bajo de actividad. Los primeros meses se centraron en la modernización, actualización y ajuste de la tecnología, tanto de procesado como de envasado, con el objetivo de incrementar el volumen de producción de yogures y postres, el fuerte de Clesa.

Tras adaptar la planta a las necesidades del mercado, se relanzó por completo la marca Clesa en la gama básica, sobre todo en yogures, al ser una enseña conocida por el consumidor. Este paso incluyó el cambio de logo -se mantiene la imagen de la vaca en azul y las letras rojas, pero se incorpora el verde- y el rediseño de toda la gama. La factoría cuenta ahora con 55 empleos directos, lejos de los 160 que llegó a tener en el pasado.

El gerente de Acolact, Pablo Gómez, apunta que en poco más de un año se consiguió pasar de un millón de yogures al mes hasta los doce millones actuales, un volumen que ya les permite «ser eficientes». Destaca que Clesa es la «única empresa de yogures en distribución nacional de capital 100 % gallego», y la primera a nivel nacional en certificarse con el distintivo «Galega 100 %». La firma prevé cumplir su plan de negocio, que establece la comercialización de más de 20.000 toneladas de refrigerados lácteos en el 2014 gracias a un posicionamiento intermedio entre marca blanca y marca líder. Para ese año, la apuesta pasa por trabajar en proyectos innovadores para ampliar la gama de producto (envases biodegradables, utilización de gelificantes o incorporación de prebióticos). Con vistas al futuro no se descarta crecer en la torre de secado en polvo y la quesería, aunque lo principal es seguir incrementando la producción de yogures y postres.

clesa en caldas de reis