Abanca: 12 meses en 10 claves

Rubén Santamarta Vicente
rubén santamarta REDACCIÓN / LA VOZ

ECONOMÍA

M.MORALEJO

La entidad líder del mercado gallego cumple un año de plena autonomía tras un lustro convulso

26 jun 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

Hace justo un año Galicia amanecía empapelada con un nombre en azul y blanco: Abanca. Fue una tarea ardua: 800 horas de trabajo de diseño y fabricación, otras 108 de instalación y 14 más para descubrir la nueva identidad en 630 edificios y sucursales repartidos por siete países; marquesinas, vallas, paneles, globos, cojines y hasta torres de control de los tres aeropuertos gallegos.

Doce meses después, la dirección de Abanca -entidad que controla más de un tercio de todo el negocio bancario de Galicia- ha tratado de demostrar que aquello no fue solo un cambio de denominación, sino de filosofía completa tras cinco años convulsos en el sector financiero: fusión de las dos cajas, cuatro ERE, conversión en banco, nacionalización, imputación de directivos, pérdidas millonarias, preferentes, subasta... Estas son las 9 claves del curso; y una décima para el resto del camino.

La nueva marca

Triple A «totalmente consolidada». La nueva enseña se estrenó después de que la entidad se librara de la tutela del FROB. Juega con la denominación «la banca» en gallego, y con la triple A que lleva integrada, símbolo de máxima solvencia. Se instaló en toda la red -cartelería, publicidad, tarjetas y hasta bolígrafos- con rapidez, sin dejar rastro del pasado. Lo cierto es que durante años en la calle había cierto caos. Pese a la fusión de las dos cajas gallegas, llegaron a convivir a la vez oficinas con las marcas Caixa Galicia, Caixanova, Novacaixagalicia y Novagalicia. La dirección dice que la nueva identidad está «totalmente consolidada».

El Consejo

Sin recuerdos del pasado. Abanca puso en marcha un consejo de administración con fichajes sonados (Carina Szpilka, exresponsable de ING en España), economistas independientes, un empresario de la influyente familia venezolana Capriles, y un grupo de directivos muy cercanos a Juan Carlos Escotet, dueño de la entidad. No hay reminiscencia alguna al consejo anterior.

El equipo directivo

Nueva estructura. Lo mismo en la dirección que en el consejo: un hombre fuerte (Francisco Botas), con un su propio equipo, prescindiendo de altos cargos anteriores. Emergió una nueva generación.

El frente laboral

Nuevo horario tras el cuarto ERE. La plantilla de las cajas gallegas ha sido una de las más castigadas por la reestructuración: cuatro ERE consecutivos que han supuesto pasar de casi 8.000 puestos a poco más de 4.600 en cuatro años. Se ha recuperado la paz laboral, pese al incremento de horas por la apertura (novedosa en el sector) de oficinas por la tarde, que provocó un serio disgusto.

Política comercial

A los orígenes. La dirección es partidaria de volver a la llamada banca aburrida: productos sencillos, y actividad convencional. Se acabaron aventuras y participaciones en empresas. Tres cifras resumen el año: 3.939 millones más en depósitos de clientes; 1.032 millones más en créditos; y 1.157 millones de beneficio, algo inédito e inesperado.

La calificación

Mejora parcial. Las agencias Fitch y S&P, que son las que acceden a las cuentas de Abanca, han mejorado su calificación de riesgo, aunque esta sigue en los escalones bajos. Además, la entidad contrató a una tercera agencia, DBRS, cuyo primer informe fue en sintonía con los de las dos anteriores. Subir esas notas es uno de los objetivos claros a corto plazo.

Los procesos judiciales

Aplacadas las preferentes. Se llegó a pactos personalizados con los preferentistas que quedaban sin resolver su situación, y logró que las plataformas que había en Galicia se disolvieran. Aun así, al cierre del 2014 quedaban denuncias por 122 millones de euros.

Fusión del Etcheverría

Último gran hito. A finales del 2014 se dijo adiós al banco más antiguo de España: el Etcheverría. La entidad en la que empezó su negocio bancario Escotet en España, se integraba en Abanca.

La Obra Social

Garantizada de forma indirecta. La puesta en marcha de Abanca coincidió con el renacimiento de la obra social. Nacía Afundación, con nuevo patronato y fondos que le aportará el banco, de forma voluntaria. Un 3 % de los beneficios netos irán ahí.

...Y en solitario

¿Nueva reestructuración? El Banco de España mantiene que la banca española tiene que racionalizar costes y proceder a nuevas integraciones. En el sector se señala a toda la banca mediana, y eso incluye a Abanca, permanentemente en las quinielas. El mensaje de Escotet en todo este tiempo (mensaje que mantiene hoy) es el mismo: «Abanca es como un hijo, y los hijos no se venden».