Los astilleros de Navantia en la ría ferrolana están realizando ya los preparativos para el arranque en los talleres del único encargo que tienen actualmente adjudicado, la construcción de un flotel para la petrolera mexicana Pemex. La chapa de acero necesaria para dar forma a su estructura ya está encargada, según afirmó recientemente el presidente de la SEPI, y diversas fuentes apuntan a la primera semana de junio como la fecha posible para el comienzo de los trabajos de fabricación. No obstante, desde Navantia se insiste en que aún no hay un día fijado, ya que es una de las actuaciones en conversación con el armador.
Las factorías públicas gallegas llevan desde el 2 de diciembre sumidas en la paralización. Entonces abandonó las instalaciones de la antigua Bazán el Adelaide, el segundo de los megabuques fabricados para la Armada de Australia.
El 7 de febrero, los máximos responsables de Pemex y PMI se desplazaron a Ferrol y Vigo para dar el pistoletazo de salida a la obra en Navantia y Barreras. Anunciaron que los buques se harían a la par en ambas factorías y que comenzaba entonces a contar el plazo de 30 meses -20 de fabricación y uno de traslado a México- de entrega de los dos floteles, que servirán de apoyo a las dotaciones de las plataformas petrolíferas que operan en el país.