Cuarenta empleados de un almacén de Ourense acumulan seis nóminas sin cobrar
23 nov 2012 . Actualizado a las 07:00 h.A los cuarenta empleados de un almacén ourensano hace ya varios meses que el banco no les notifica el recibo de la nómina. En concreto, según aseguran desde el comité de empresa, les adeudan seis salarios, entre mensualidades y extras. «Hay gente que lo está pasando muy mal. Tenemos casos de marido y mujer que trabajan juntos aquí desde hace muchos años. Ahora se ven impotentes para hacer frente a la hipoteca, los recibos de la luz, el agua o el colegio de los niños», explicó uno de sus portavoces, José Manuel Barrera.
El día a día para los empleados de los almacenes Diéguez Global, una empresa con sesenta años de experiencia en el sector de la distribución textil y que posee otra planta en A Coruña, tiene mucho de desesperación y poco de trabajo. «Aquí no fabricamos. Solo distribuimos, y hace siete meses que no nos entra material. El equipo de comerciales trata de vender los restos que quedan en el almacén. Para el resto del personal, lo que hay que hacer se liquida en cuarenta minutos. Cuando se acabe ese material tendremos que seguir viniendo, pero nos tendremos que dedicar a jugar a las cartas porque trabajo ya no vamos a tener», indicó uno de los portavoces de los trabajadores.
En ese escenario sin ingresos fueron ya varios los trabajadores que optaron por irse voluntariamente de la empresa: «A nosotros nos cuesta mucho dinero venir a trabajar. Si la empresa no tiene solución, que cierre. Por lo menos, así cobraríamos el paro». Y es que a los trabajadores de este almacén ourensano no les salen las cuentas: «La ley nos obliga a seguir viniendo, si no te lo pueden llegar a considerar una baja voluntaria». La nave se encuentra a siete kilómetros de la ciudad de Ourense y cada día tienen que desplazarse en dos ocasiones: «Se están haciendo ya grupos para venir juntos y ahorrar en gasolina para ajustar un poco más los gastos. También hay gente que ha decidido quedarse a comer un bocadillo en la nave y ahorrarse el trayecto del mediodía».
El futuro no se presenta mucho mejor. A la vuelta de la esquina están las Navidades, una época especial en lo personal y también en lo profesional, ya que deberían percibir tres pagas. «Si esto sigue así, a día 1 de enero nos plantamos con diez mensualidades sin cobrar», detalló Barrera.
La versión de la empresa
Por su parte, la dirección de la empresa justifica el retraso en los pagos a los trabajadores del centro ourensano -solo reconoce atrasos de tres mensualidades y dos pagas extras- por un problema financiero transitorio que afecta a su liquidez. «Los trabajadores saben que estamos buscando soluciones, y seguramente en diez días estará todo arreglado», indicó su director general, Sergio Diéguez. Se trata de un discurso que, sin embargo, ya no cala entre los trabajadores. «Lo que el personal piensa es que la empresa ya no tiene viabilidad. Se dilapidó el prestigio de sesenta años y ya no confiamos en sus promesas», matizó el portavoz del comité de empresa.
Sin embargo, desde la dirección de Diéguez Global aseguran que en breve podrían cerrar la incorporación de un inversor extranjero.
los rostros de la crisis ourense