Todos se vuelcan con Julia Vaquero

x. r. c. VIGO / LA VOZ

DEPORTES

alfredo Bandallo / valmiñor.com

Estrellas del deporte gallego piden ayudas para la atleta de A Guarda, y reivindican un plan de apoyo para los deportistas de élite cuando se retiran

03 oct 2017 . Actualizado a las 13:48 h.

La figura de Julia Vaquero no puede quedar en el olvido, y menos con una pensión no contributiva de 369 euros y la ayuda del COE pagándole medicinas y el tratamiento psicológico por mor del trastorno bipolar que padece desde hace tiempo. Deportistas de élite ya retirados reflexionaron para La Voz sobre la difícil inserción tras toda una vida entrenando, quejándose de la falta de apoyos y alertando de la necesidad de adoptar un modelo que permita aprovechar a los mitos más allá de sus días en el primer plano. Y la guardesa es una de esas figuras a rescatar y cuidar.

ANDRÉS DÍAZ

«Debería terse en conta todo o que aportou e o que pode seguir aportando»

Andrés Díaz, exatleta de 1.500 metros, es coetáneo de Julia Vaquero y considera que «os rapaces deberían vela como unha gran campioa e que aportase toda a súa experiencia, non nesta situación». El coruñés se lamenta de que los deportistas no tengan el mismo sistema que otros países como Alemania e Italia «onde os reciclan outra vez dentro do sistema». Critica que como teóricos deportistas aficionados que eran no tributasen a la Seguridad Social, aunque tenían obligaciones fiscales, «porque eso significa que cando te retiras non tes ningún ano cotizado e atópaste cun vacío tremendo».

SANTI PÉREZ

«Es el debe que aún tiene la sociedad española con sus deportistas de élite»

Marchador olímpico y actual responsable español de la disciplina, reclama una plataforma de inserción laboral. «Hoy en día hay bastante apoyo hacia el deportista durante su carrera, pero una vez que se acaba no hay una plataforma dedicada a ellos para incorporarlos al mundo laboral. Es lo que nos falta para cerrar el círculo. En España te retiras y te sientes abandonado, desde el Gobierno se deberían buscar soluciones». Tiene envidia sana del método italiano, con los deportistas cotizando desde el primer momento al estar adscritos a los cuerpos de seguridad del estado.

DAVID CAL

«A veces dar el paso de la vida deportiva a la laboral es complicado»

David Cal es el deportista gallego más laureado en los Juegos Olímpicos y sin embargo el canoísta tuvo que emigrar a la UCAM de Murcia para vivir tras el deporte. El cangués considera que «a veces es complicado dar el paso porque dedicas toda tu vida a entrenar y a competir y no tienes vida laboral. Tienes que comenzar desde cero y la reinserción se hace complicada». Piensa que deben existir mecanismos especiales para casos como el de Julia Vaquero.

LOLY PEDRARES

«Nós queremos facer algo como de auxilio social»

Loly Pedrares, exlanzadora de martillo, conjuntamente con David Cal y otros deportistas trabajan en un proyecto de una fundación de apoyo a los deportistas gallegos. Entre sus ideas aparece el poder ayudar en casos como el que ahora sacude a Julia Vaquero: «A nosa idea é poder darlle un diñeiro a un deportistas con unha cantidade ao mes para que teña algo que lle permita buscar un traballo ou estudar e que teña unha especie de paro para andar pola casa». Aunque en su pensamiento el problema ya hay que atacarlo antes: «Hai que dar facilidades para que os deportistas concilien a vida deportiva e a formación, que podan ter algo cando acaben». Puntuliza, además, que aun teniendo formación les falta experiencia «e as empresas dalles igual que teñas tres medallas».

ALESSANDRA AGUILAR

«No es un cuestión de un deportista, cualquier persona con una situación así debería tener ayudas»

La maratoniana Alessandra Aguilar no hace diferenciaciones entre deportistas de élite y otras personas, «porque sobrevivir con 300 euros al mes es imposible y se necesitan ayudas». La lucense tiene claro lo que supone Vaquero en Galicia: «Julia ha sido una gran atleta a todos los niveles y ella viviendo en Galicia y con la tradición que hay en la zona que ella vive es una pena que no se haya hecho uso de ella para poder fomentar el atletismo en categorías menores o simplemente como motivación, con charlas en los coles o cualquiera cosa».

La Xunta trabaja en un programa de inserción laboral

La Secretaría Xeral para o Deporte trabaja en la creación de un programa «que axudará aos deportistas de alto nivel á súa inserción laboral», una iniciativa que intenta servir de punto de encuentro entre los demandantes de empleo y las empresas. El objetivo del organismo autonómico es que esté implementada antes de final de año una iniciativa «pola que os deportistas galegos estarán máis protexidos e contarán con máis oportunidades unha vez rematen a súa carreira deportiva». Todo, con la premisa de que «casos como o de Julia Vaquero sexan eventuais e non se repitan».

En la actualidad la Lei do Deporte en Galicia ya apunta que «a administración autonómica establecerá as formas de apoio para os deportistas galegos de alto nivel, así como a súa inserción social e profesional durante a súa carreira deportiva e ao final desta».

Mientras la SXD trabaja en el nuevo decreto del Deportista Galego de Alto nivel que debe recoger soluciones para avatares como los que padece la atleta guardesa, Isidoro Hornillos, el presidente de la Federación Gallega de Atletismo, va más allá y además de reclamar una legislación específica, pide una pensión vitalicia para estos casos. «Creo que nestes casos concretos deberían ter unha paga vitalicia polos servicios prestados ao deporte. Nós, como federación galega, non temos capacidade pero creo que habería que crear unha lexislación autonómica-nacional, porque nós temos competencias en materia deportiva, cuns fondos do estado ou da Xunta». Poniendo en marcha una comisión con médicos y psicólogos, además de la federación y el ente autonómico.

Hornillos fue de los primeros en intentar ayudar a Vaquero hace años. Le tenía pactada una escuela municipal de atletismo, pero no llegó a tomar posesión. Su enfermedad se lo impidió. Él mismo fue el que escribió y se puso en contacto con el COE, que ahora asume los gastos de los medicamentos y psicólogos.