Santi Millán: «Yo quería ser Robbie Williams, pero como no sabía cantar terminé aquí»

CULTURA

«Santi Millán Live!» es el título del nuevo espéctaculo del humorista catalán. Combinando música, humor y sexo, pretende dibujar una sonrisa apelando a la interacción total con el público. En él se podrá ver cómo ha resuelto su gran frustación: la de no ser el cantante de un grupo de pop

24 ene 2014 . Actualizado a las 15:03 h.

La hiperactividad de Santi Millán queda patente cuando encontrar un hueco en su agenda para hacer una entrevista se convierte en una odisea. «Por mí yo no haría nada, pero me lían», dice al poco de iniciar una conversación que, para más inri, se interrumpió varias veces por falta de cobertura.

-En los vídeos que pululan por Internet se ve que lleva un montaje espectacular.

-Bueno, para la presentación en Barcelona hicimos un montaje con andamios, luces y todo. Pero en los bolos fuera llevamos algo más sencillo.

-¿Entonces no va a venir en plan U2?

-Bueno, la estrella de pop en esencia está, lo que pasa es que sin tanta parafernalia [risas].

-¿Es uno de tantos músicos frustrados?

-Totalmente. Mi sueño desde pequeñito fue ser cantante. Vamos, que yo quería ser como Robbie Williams, pero como no sabía cantar terminé aquí. Vocalmente no estoy muy bien dotado. Sin embargo, llega una edad en la que, al plantearte un espectáculo, dices: ¿a mí qué me gusta? Ves a gente que lo hace profesionalmente aun peor que tú, así que te lanzas.

-¿Canta frente al espejo?

-Claro. Mi hijo me preguntaba el otro día: ¿Tienes que cantar todo? Sí, me sufren. En un concierto, lo mejor es estar lejos de mí, como a un perímetro de unos 50 metros.

-¿De adolescente era roquero o popero?

-En la adolescencia era heavy metal. Me gustaban Scorpions, Iron Maiden y esas cosas.

-En los ochenta o se era «heavy» o de 40 Principales.

-Efectivamente. Yo era chico de barrio y, por tanto, heavy metal a tope: Obús, Barón Rojo, Leño, Ñu... todos míticos.

-Dice que el show es de humor, sexo y música. ¿Al 33 % cada uno?

-No, todo es uno. Creo que son tres cosas que se pueden mezclar. Aunque, bueno, el humor y el sexo, depende de cuándo se rían de ti, puede ser un engorro. Pero, en general, todo con risas es mucho mejor. Y en el sexo, fundamental.

-Pues esta semana Cameron Díaz ha hecho un alegato a favor del vello púbico. ¿Lo va a incorporar a sus chistes?

-Pues no lo sabía, pero ya tengo por dónde tirar. Piensa que hay un animal que está en peligro de extinción por toda esta pasión depilatoria general: la ladilla. Se ha quedado sin hábitat prácticamente. Hay tantas plataformas a favor de las ballenas, delfines y de todo, y no hay nada para las ladillas.

-Últimamente muchos humoristas se muestran muy incisivos con los políticos. ¿Cómo lo lleva usted?

-La situación es la que es. Nosotros tenemos que hacer para que cambie. Y siempre es mejor hacerlo desde el positivismo y el sentido del humor. Nos iría mucho mejor así. En mi espectáculo trato de expandir eso: ir a mejor desde un estado de ánimo positivo.

-¿Cómo lo llaman por la calle?

-La mayoría Santi, pero en Cataluña también Paco, por una serie que hice aquí.

El espectaculo Santi Millán Live! se podrá disfrutar hoy en Vigo, en el Centro Novacaixagalicia a las 21.30 horas. Mañana, el actor actuará en A Coruña en el Teatro Colón a las 21 horas.