Fran Núñez, de analizar PCR a hacer ramos de novia: «Dejé mi trabajo en el hospital de A Coruña y emprendí»

Caterina Devesa A CORUÑA / LA VOZ

A CORUÑA CIUDAD

Fran Núñez abrió A modiño arte floral en noviembre del año pasado
Fran Núñez abrió A modiño arte floral en noviembre del año pasado EDUARDO PEREZ

El año pasado abrió su negocio de flores preservadas en la calle Real y cierra 2023 con 80 bodas. Además, elabora todo tipo de detalles con flores preservadas

11 dic 2023 . Actualizado a las 05:00 h.

Con 30 años, Fran Núñez, natural de O Barco de Valdeorras, decidió dar un giro a su vida. «Soy técnico de laboratorio. Estuve tres años trabajando en el hospital de Ourense y otros tres en el de A Coruña, en donde me coincidió toda la pandemia. Finalmente, el año pasado, decidí dejarlo», señala.

Tras vivir meses de angustia en el trabajo por la llegada del covid, decidió coger unas vacaciones. «La pandemia nos pilló grande. De la noche a la mañana, nos pidieron que analizáramos PCR, que casi ni sabíamos qué era. Como sanitarios se nos exigió muchísimo. Es cierto que poco a poco nos fueron dotando de los recursos necesarios y pudimos trabajar bien, pero al principio fue una locura», relata Fran. Después de tres años sin vacaciones, «porque enlazaba un contrato con otro», aclara Fran, pidió una suspensión para poder descansar. «Dije: Necesito parar. Me fui a Tenerife, tampoco hice un superviaje ni nada, pero durante esos días de descanso me planteé si con 30 años esa era la vida que quería llevar o si quería apostar por otra cosa». Así, a su vuelta a A Coruña ya no se incorporó a su puesto en el laboratorio. «Decidí que quería hacer otra cosa».

Así, Fran se embarcó en la aventura de abrir su propio negocio. «Desde pequeño me gustaron las flores y opté por abrir una floristería. Como comencé en casa y vi que no podía tratar flores frescas, tras investigar, decidí especializarme en flores preservadas», comenta el hombre, que destaca que tuvo mucho apoyo. «Normalmente cuando uno deja su trabajo, el entorno piensa que esta loco. En mi caso, mis padres me apoyaron mucho. Ellos son autónomos y conocen cómo es esto de emprender. Mis amigos también estuvieron a mi lado, así que estoy muy contento en ese sentido».

Flores preservadas

En noviembre del año pasado, Fran abrió su local en las galerías de la calle Real, pero llevaba desde el verano al frente del negocio. «Este primer año fue muy positivo». Sin embargo, los inicios fueron duros. «El primer encargo me lo hizo mi madre, y el segundo, una vecina», cuenta Fran, que se fue dando a conocer a través de las redes sociales. «Comencé yendo a ferias y empecé a conocer un poco más del mundillo de las flores preservadas. Después, me apunté a Expobec, la feria de bodas de Galicia, y conocí a mucha gente del sector. Poco a poco, se fue dando a conocer en el mundo de los eventos. «Justo había ese bum por las flores preservadas, que ya eran tendencia en otros países y que aquí se están introduciendo. Se juntaron los astros y voy a cerrar el año habiendo hecho 80 bodas. Siempre digo que no se sé si tengo un ángel o alguien que me está ayudando porque es muy complicado empezar algo y he tenido mucha suerte. Siempre es complicado emprender. También me ayudó mucho entrar en Artesanía de Galicia», dice Fran, que elabora ramos muy originales. «Fuera de España se hacen muchas bodas temáticas, aquí aún está muy presente el qué dirán, pero poco a poco hay quién se anima. Hice varios ramos temáticos, uno de Harry Potter con los colores de Gryffindor, uno de Grease, otro de El retorno de las brujas...», cuenta Fran, que comparte en Instagram el proceso de elaboración de sus creaciones.

Ramos temáticos

Para el próximo año ya tiene cerradas 25 bodas. «Creo que va a ser parecido a este. De momento estoy solo, pero si sigo con este ritmo tendré que buscar a alguien para que me ayude. Estoy muy feliz, pero son muchas horas de trabajo. En el hospital hacía mi horario y ya, pero aquí estoy de nueve de la mañana a diez de la noche y no es solo elaborar los ramos o centros, es contestar mensajes, subir los vídeos, etc», comenta Fran, que destaca la personalización que hay detrás de cada uno de sus trabajos. «Me gusta conocer a los clientes. Cuando hago los ramos de novia, quedó con ellas, nos tomamos un café y me van contando sus gustos», dice. «Hago envíos a todo el país, pero también se han ido ramitos a Francia, Portugal, y en diciembre uno se irá hasta Perú».

Con la inminente llegada de la Navidad, Fran ofrece coronas y también adornos para el árbol, como bolitas con flores dentro. «También hago detalles para regalar, como el marco con la inicial de un nombre en flores, o tacitas y velas, que hago en colaboración con otras marcas». explica. Igualmente, ofrece la opción de hacer una replica de un ramo de novia. «No es lo mismo una flor seca que una preservada. Las secas quedan frágiles y las otras no, porque son tratadas y duran para toda la vida si se cuidan bien. Por eso, hay novias que me han mandado fotos de su ramo y le he hecho la réplica. Un encargo fue para colocar el ramo en un cuadro», indica Fran, que hizo varios talleres. «Uno de coronas de navidad y otro de centros navideños, con una duración aproximada de dos horas». Para apuntarse al siguiente, solo s necesario seguir a Fran a través de su Instagram, A modiño arte floral. «Se llama así porque mi madre siempre me dijo: las cositas se hacen poco a poco».