La alcaldesa de A Coruña, Inés Rey, lleva al juzgado al portavoz del PP, Miguel Lorenzo, por culparla de acoso a tres funcionarias

La alcaldesa de A Coruña, Inés Rey, anunció durante el pleno de este jueves que presentó una papeleta de conciliación ante un juzgado contra el portavoz del PP local, Miguel Lorenzo, por acusarla de acosar a tres funcionarias. En caso de que esta vía no prospere se irá a una querella. El asunto tiene su origen en las obras que se habían realizado en una propiedad del portavoz municipal, José Manuel Lage, en las que el PP y el BNG consideraban que había «irregularidades». Durante la sesión, el edil anunció el archivo por parte la Fiscalía de una denuncia anónima por esta cuestión y que habría originado el supuesto acoso las funcionarias después de que enviasen  la información relativa a este asunto.

En el último asunto de la sesión plenaria, una pregunta del PP sobre la situación de los taxis y los vehículos de transporte con conductor, Inés Rey tomó la palabra (algo que no suele hacer) para responder a las declaraciones realizadas por el líder del PP sobre un supuesto acoso por parte de la regidora a tres funcionarias municipales. «El señor Lorenzo como portavoz hizo unas declaraciones que han recogido una falsedad tan grave como que usted afirmó ser conocedor de que tres funcionarios municipales fueron llamados al despacho de la alcaldesa y acosados, por lo cual está imputando un presunto delito de acoso a los trabajadores», dijo la regidora, que indicó que este miércoles «se cruzó una línea».

«Eso es mentira, es absolutamente falso. Por primera vez le llamé por teléfono y le dije que le daba la oportunidad de retractarse de esas declaraciones porque eran falsas. Ningún funcionario fue acosado en mi despacho, yo no llamé al despacho a ninguna funcionaria, y me respondió que no se iba a retractar y que era conocedor de que estuvieron en mi despacho y las acosé, es falso», aseguró Rey, que intervino después de que Lorenzo expusiese que había recibido la llamada de un miembro de la corporación, sin decir quién, advirtiéndole de una posible querella. 

«Le anuncié que se me había acabado la paciencia y que, si en el plazo de una hora no lo retiraba, interpondría una conciliación previa», algo que ejecutó este jueves. Rey hizo alusión a lo que consiste una calumnia y culpó al PP de estar trasladando prácticas de la política de Madrid al Parlamento gallego y al Ayuntamiento. «Jamás pensé que fuéramos a llegar a este punto», añadió Rey, que dijo que espera que Lorenzo «sea capaz de explicar algo que es radicalmente falso». «Su desprecio a la verdad solo es comparable al que tienen a este Ayuntamiento y a esta ciudad. Solo le quedan la difamación y la calumnia», concluyó.

La respuesta de la alcaldesa se produjo como réplica a la intervención de Miguel Lorenzo en el último punto de un pleno en el que diversos concejales del PP ya habían hecho alusiones a este asunto. «Ayer fue mi peor día en la política», empezó el portavoz popular en alusión a la llamada en la que se le dijo que le presentarían una querella. «Fui a un abogado, me dijo que tengo la posibilidad de demostrar que lo que digo es verdad», dijo Lorenzo, que insistió en que se le «abrieron diligencias» a las tres funcionarias.

«No miento cuando hablo, no es un bulo, pueden ir corriendo a un juzgado a querellarse, pero no me van a intimidar, no voy a dejar de cumplir la función que se me ha encomendado en la oposición», expuso Lorenzo, que añadió que hay funcionarios municipales «que se sienten amedrentados». «Son tres mujeres que tuvieron mucha zozobra», sensación que repitió al referirse a cómo se había sentido tras la llamada que recibió.

Sobre el archivo de la denuncia por parte de la Fiscalía, Lage Tuñas criticó que el PP «non só perseguía unha acusación política, senón tamén contra quen participou nun procedemento reglado. Estou esperando as súas desculpas, que nunca lles sinalen cunha diana unha vivenda súa. Cando se pasa a raia hai que estar moi seguro», dijo.

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