Un corazón de rock n' roll

AL SOL

GONZALO SOLÍS, BATERÍA DE EXTREMA URGENCIA
GONZALO SOLÍS, BATERÍA DE EXTREMA URGENCIA

Gonzalo Solís se operó de la válvula mitral el mismo día que lo hizo Mick Jagger y cuatro meses después volverá al escenario a tocar con su banda

03 ago 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

Gonzalo Solís tiene 69 años y un corazón reparado. Late rock n’ roll, como el de su admirado Mick Jagger. Los dos tuvieron problemas cardíacos y fueron operados el mismo día (el 4 de abril) de un problema similar (la válvula mitral). Y los dos, pese a todo, van a seguir roqueando. Jagger con los Rolling Stones. Solís con Extrema Urgencia, la banda en la que toca la batería y que honra a los clásicos de los sesenta Entre ellos, por supuesto, a los Rolling Stones. «Entre Beatles y ellos prefiero siempre a los Stones, su rock es más puro», dice.

Mañana tendrá lugar el retorno. Será en la playa de Gandarío (Bergondo) en La Espina, a las 20.00 horas. «Tengo muchas ganas», dice Solís ilusionado con el retorno. ¿Habrá guiños a su colega Jagger? «Bueno ese es bastante crápula, yo me identificó más con Charlie Watts, el batería. Toca con gran elegancia y discreción. Es todo un ejemplo».

Con esta actuación Gonzalo pretende encaminar su vida a la normalidad previa a la operación. «Me descubrieron el problema por casualidad -recuerda-. En febrero fui al médico de cabecera porque tenía una tos muy fuerte. Me hicieron una placa y ahí apareció todo». Se activaron las alertas. El abril ya estaba en el quirófano. La operación tuvo lugar en el Chuac de A Coruña «El cirujano con buen criterio intentó reparar la válvula», dice. Pero no fue posible. El 13 de mayo, volvió al quirófano y le pusieron una artificial. Lo que no hace muchos años hubiera sido un fallecimiento seguro, ahora es la oportunidad de seguir disfrutando de la vida

En sus labios no hay más que agradecimiento: «Te digo una cosa: ese hospital es una maravilla. Nunca me había estado hospitalizado y, de pronto, estuve cuatro meses. Tenemos una gran suerte de contar ese equipo de gente, desde las limpiadoras hasta el cirujano. Solamente, lo sabes cuando estás allí. Ahí te das cuenta. Esperemos que no venga un político y no estropee todo».

Detective privado y piloto

Gonzalo Solís es una persona que no hace mucho caso a las supuestas limitaciones de la edad. «Solo es una referencia. A mí lo que ponga el DNI me importa un bledo», señala este detective privado que espera seguir con su profesión. Sin embargo, las circunstancias le han obligado a tirar de freno de mano. «El posoperatorio dura un año. Yo ahora si camino 200 metros me canso muchísimo» ¿Y cómo hace para tocar la batería? «Eso no me cansa y lo puedo hacer», explica. Donde sí hay obstáculos es en su otra pasión. «Me gusta la aviación y lo más probable es que pierda la licencia de piloto Ahora ya no voy a poder volar solo, pero no me resisto a dejar de volar. Uno se revela contra las limitaciones».

Una de ellas, la de volver a tocar con Marcial, Xosé, Antonio, Diego y Chema, sus compañeros de Extrema Urgencia, la va romper mañana. Tocarán temas de The Kinks, Jimi Hendrix, The Beatles y, por supuesto, los Rolling Stones. Él llevará el ritmo con su corazón de rock n’ roll.