El primer pontevedrés que accede a la presidencia de la Xunta por sufragio universal tiene para este mandato unas cuántas tareas pendientes en su ciudad
Algunos van más allá y, además de dejarlos entrar, les ofrecen comida y les dan de beber: «Hay bocatas para humanos y pienso para ellos», dicen desde la mítica bocatería Tris de Pontevedra