Morbo

Beatriz Manjón

TELEVISIÓN

05 nov 2011 . Actualizado a las 06:00 h.

Cualquier persona, por deleznable que sea, tiene derecho a dar su versión de los hechos que se le imputan, y cualquier familiar de un imputado tiene derecho a explicar lo ocurrido. El lugar idóneo es un juicio, pero con demasiada frecuencia los platós se convierten en juzgados, los periodistas en jueces y los espectadores en jurado. Como periodista entiendo que se quieran conocer los detalles de determinados sucesos. El límite de esa curiosidad debe marcarlo la honestidad, la vocación de aclarar los hechos y no de alimentar el morbo. Para que esto se cumpla no debe mediar dinero, una biblia nada fiable sobre la que jurar. La entrevista que La noria hizo a la madre del Cuco, condenado por encubrimiento en el caso de Marta del Castillo, a cambio de diez mil euros, no ha servido más que para indignar a los padres de Marta, a parte de la audiencia y ahora a algunos anunciantes que se han bajado de La noria y que no detallo porque comparto, en parte, la opinión de Jordi González de que es una decisión oportunista. ¿Por qué no retiran su publicidad de los espacios que promueven la homofobia, por qué no lo hicieron cuando Ana Rosa entrevistó a la mujer de Santiago del Valle?

Claro que él no está libre de pecado y la grandeza también consiste en reconocer que no se ha estado a la altura.