Generación de «seriéfilos»

TELEVISIÓN

27 mar 2011 . Actualizado a las 06:00 h.

Cuando el mundo se ha revolucionado con las redes sociales, resulta que la estrategia del boca a boca ha conseguido otra revolución televisiva: que toda una generación se haya vuelto seriéfila. A falta de cine para adultos, aquellos que crecieron con la sesión de tarde han sucumbido ante la maestría de los guiones de las series de ficción, dignos del mejor filme. Pero la primera curiosidad de esta revolución es que no se ha producido cuando estas series se han colado en la parrilla, no, no, el furor se ha ido desatando de tú a tú y el espectador se ha movilizado para hacerse con el producto saltándose las reglas previstas: comprando las series en DVD o bajándolas de Internet, en ese mundo yonqui en el que trafica la mayoría. Y ahí, en el reino de las imprescindibles, habitan Mad Men, The Wire y Los Soprano. La tríada que ha recuperado el entusiasmo por compartir lo visto, en una vuelta a los sentidos: oír, ver, tocar... Pero hay más, muchas más. Se ha desatado la locura, y las cadenas se han lanzado también en España a producir y a recuperar las clásicas, y así, de la mano de Don Draper (¡que más quisieran algunas!), ha comenzado una nueva era. Sí. Tiene razón Jorge Carrión en su ensayo, si Shakespeare viviera hoy sería guionista de televisión..., y tendría el beneplácito de Billy Wilder.