Exigen medios para rescatar a la vaca atrapada en el río Deza desde el viernes
GANADERÍA
Los vecinos no fueron capaces de sacar al animal del cañón y su salud empeora
15 nov 2021 . Actualizado a las 19:58 h.Los vecinos de Bascuas, en Vila de Cruces han hecho un llamamiento público en busca de ayuda para rescatar del cauce del río Deza a una ternera de dos años y medio que está preñada de siete meses y que lleva desde el viernes atrapada en el cañón fluvial.
La ternera se había escapado de una cerca la noche del jueves junto a otros dos animales. El viernes por la tarde, siguiendo las huellas, los tres ejemplares fueron localizados en aguas del río Deza. Las terneras se habían caído al río en una zona bastante profunda conocida como Pozo Negro y habían sido arrastradas por la corriente hasta un área pedregosa de donde no eran capaces de salir por sus propios medios. En el punto al que llegaron, el río discurre encajonado entre barrancos. Para salir del cauce es preciso salvar un desnivel de más de diez metros de pendiente sembrados de piedras. El viernes, los vecinos solo pudieron poner a salvo a los animales a la orilla del río. El sábado a primera hora comenzó el operativo de rescate. Los vecinos lograron acondicionar mínimamente un camino y, haciendo ímprobos esfuerzos, consiguieron subir a dos de las terneras. Con la tercera no hubo manera. El animal estaba dolorido, asustado y sin fuerzas, así que se optó por darle un reconstituyente y dejarle descansar hasta el domingo, para que recuperase fuerzas para un segundo intento de rescate. Sin embargo, tampoco fue posible ponerla a salvo.
El operativo dominical comenzó a las nueve de la mañana. Los vecinos tiraron de ingenio. «Levamos ata alí unha cuxa para ver se así se estimulaba a vaca e subía, axudándoa con cordas. Case o conseguimos. Subiu a metade da costa, pero chegou alí e deitouse. Non daba máis. Está dolorida e asustada», explica Ramón Varela, yerno de los propietarios de la explotación ganadera de Bascuas. Pasada media mañana, los vecinos se dieron por vencidos y decidieron que lo mejor era dejar descansar a la vaca otra noche más y reintentar el rescate el lunes por otro sistema.
«A idea é que veña unha escavadora do Concello para intentar abrir un camiño por outro lado. Aínda que sexa máis largo, que sexa máis doado para o animal. A ver se así damos subido a vaca. Se non somos capaces, haberá que intentar levantala en peso coa pala ou cun camión grúa ou co que poidamos. Aí non podemos deixala», dice Ramón.
Después de la caída al río, la vaca durmió al borde del cauce las noches del viernes y del sábado, arropada con paja el primer día y con mantas el segundo. Familiares y vecinos se turnaron para no dejar solo en la noche al animal malherido. El cansancio empieza a hacer mella. En la noche del domingo el animal se quedó acompañado de una radio y una linterna encendidas, para ahuyentar a las alimañas.
La familia agradece el extraordinario apoyo recibido de los vecinos y del Concello de Vila de Cruces desde el primer momento. «Non sei como llo imos pagar. Veu xente de todos os pobos de arredor. Levantáronse cedo e moitos estiveron aí sen comer e algún sen durmir. O alcalde o mesmo. Non o coñeciamos de nada e desviveuse por axudar. Puxo as botas e traballou como se as vacas fosen súas», dice Marina Vilariño, la hija de los propietarios del ganado.
«A vaca vai a menos»
Familia y vecinos, en cambio, echan de menos la ayuda de otros organismos. «¿Onde están a Garda Civil, Medio Ambiente, o Seprona ou Benestar Animal? Cando é para multar aparecen enseguida e agora fan que non se enteran», critican los vecinos. «Agora o que sentimos é impotencia. Párteseche a alma vendo que a vaca vai a menos e segue alá abaixo», explica Marina.