El último disgusto de Iker Casillas

martín bastos

SOCIEDAD

Óscar Ortiz

Una exnovia lo retrató en Sábado Deluxe como «muy buena persona», pero asegura que mantenía relaciones paralelas

22 mar 2021 . Actualizado a las 15:59 h.

No está siendo una buena época para Iker Casillas. Tras la separación anunciada de Sara Carbonero y los rumores sobre la existencia de una tercera persona en su vida, este fin de semana le ha salido una antigua novia que lo ha retratado en el plató de Sábado Deluxe.

Se llama Ruth, y ha detallado algunas características de la personalidad del mítico deportista, al que, asegura, le tiene mucho cariño porque es «muy buena persona». Ruth ha explicado que su relación fue un tanto extraña ya que no hacían vida social: «Lo conocí en 2002 y hasta el 2008 tuvimos relaciones íntimas. Yo me dedicaba al mundo de la moda, un día tuvimos un evento y salimos a tomarnos algo mis amigas y yo. Él vino, y me pidió mi teléfono. A mí me pareció un chico encantador y súper humilde, y por eso le di mi teléfono».

Todo iba bien hasta que Ruth se entera que Iker Casillas tiene una relación paralela con otra mujer de Móstoles: «Yo le admiro, es buena persona y buen chaval en general. El problema es que es muy desconfiado, muy raro y empezó a haber mentiras. Yo empecé a salir con él en el 2002 y a través de compañeros suyos me enteré que estaba con una chica que se llamaba Laura, aunque él me había dicho que ya no estaba con ella».

Una de las cosas más llamativas de la entrevista fue que Ruth desveló que Iker Casillas no era nada detallista, de hecho, le tachó directamente de tacaño: «Es muy tacaño, estaba conmigo y cuando llegaba una fecha importante jamás tenía un detalle conmigo. Las cenas eran en mi casa, en la suya o en la de un compañero del Madrid. Nunca me regaló nada en mi cumpleaños o San Valentín. Yo de estas cosas no era consciente porque no las quería ver, decía ‘da igual'».

Otra de sus crisis vino cuando Ruth se enteró que el futbolista estaba con Eva González: «Él estaba con Eva y me llamaba me decía que había discutido, que no se qué... Me contaba su vida y me decía que la dejaba, pero al día siguiente me llamaba para quedar. Quedábamos tres días y luego me enteraba por la prensa que seguía con Eva. Yo podía llamarle a cualquier hora, pero él cogía el teléfono cuando le daba la gana. Cuando me enteré por segunda vez que estaba con Eva y a mí me había dicho que ya no estaba con ella, llamé a Lydia Lozano».

También habló Ruth de la relación de Iker con sus padres, y aseguró que el portero siempre tuvo los pies en el suelo porque ellos gestionaban su patrimonio, lo que provocaba que tuviera discusiones con sus parejas, entre ellas Eva González: «En una de las llamadas que me hacía cuando se enfadaba con Eva me contó que se iban a ir a vivir juntos, que habían elegido los muebles y comprado un plasma; pero sus padres cuando fueron a ver la casa les dijeron que por qué una casa con tanto lujo, que devolvieran todos los muebles y demás».